El Banco de España contribuirá a duplicar en 1988 los ingresos patrimoniales del Estado

Los beneficios del Banco de España en 1987, así como el comienzo de una nueva práctica de anticipos al Tesoro sobre los resultados económicos de cada ejercicio, contribuirán a duplicar casi los ingresos del Estado por dividendos y participaciones en beneficios durante el próximo ejercicio. Hacienda ha previsto recaudar durante 1988, por el conjunto de dividendos y beneficios directos del Estado, 74.905 millones de pesetas, de los que 45.500 millones corresponderán al Banco de España. Las participaciones públicas en otros bancos, Tabacalera y Telefónica también serán altamente rentables.

El proyecto de Presupuestos del Estado para 1988 enviado por el Gobierno a las Cortes prevé un aumento del 140% en los ingresos por beneficios del Banco de España (hasta 45.508 millones), casi todos los cuales deben ser liquidados al Tesoro.Por la participación estatal en la compañía Telefónica, que actualmente ronda el 30,4% y podría mantenerse tras la anunciada ampliación de capital para noviembre por 66.459 millones de pesetas, el fisco espera ingresar 15.998 millones de pesetas, un 40% más que en 1987. Las otras participaciones previstas no serán tan fructíferas. Pero tampoco les faltará por lo general rentabilidad, según puede observarse en el cuadro adjunto.

En términos absolutos, la principal novedad con respecto a años anteriores volverá a ser protagonizada por el Banco de España, que no podrá distraer sus beneficios en sus propias arcas hasta bien entrado el segundo semestre del año posterior al que correspondan, como ha sucedido hasta ahora. Una disposición adicional del proyecto de ley remitido por el Ejecutivo al Parlamento implantará desde 1988 la práctica de los anticipos.

En el futuro, el 1 de noviembre de cada año el banco emisor deberá anticipar el 70% de los beneficios imputables al Tesoro que haya generado hasta el 30 de septiembre de ese ejercicio.

Posteriormente, en febrero tendrá que haber ingresado hasta el 90% de los beneficios imputables a todo el año anterior.

Por estas nuevas prácticas y por el aumento de beneficios que tendrá durante el ejercicio de 1987 el banco emisor volverán a recuperarse en 1988 los ingresos estatales derivados de dividendos y participaciones en beneficios.

Fuentes de Hacienda han informado que la recuperación será más importante de lo que reflejan los presupuestos, pues en 1986 no se cumplieron las previsiones (los ingresos realmente obtenidos fueron inferiores en un 21 % a los presupuestados), y en 1987 prácticamente se lograrán al ciento por ciento de la cifra presupuestada.

Incumplimientos

El incumplimiento registrado en el ejercicio de 1986 se debió principalmente a que el Banco de España ingresó casi la mitad de lo previsto en los presupuestos porque sus beneficios de 1985 quedaron en 67.000 millones de pesetas.En 1987 ocurrirá lo contrario, aunque con menor desfase: había presupuestados 18.900 millones, y el banco emisor ha declarado 26.000 millones de pesetas de beneficios liquidables, el 61% menos que el año anterior.

Esto fue provocado por una caída del 59% (de 229.000 a 94.000 millones de pesetas) en su principal fuente de ingresos, las operaciones con divisas, cuya disminución no pudo ser compensada por el incremento del 24% en las operaciones interiores.

Para el presente año -beneficios a ingresar en 1988- se espera que, sin interrumpirse el buen comportamiento de los rendimientos por operaciones interiores (el banco emisor actúa de intermediario en la colocación de deuda pública con beneficios y ha cobrado en los últimos meses tipos situados en torno al 17%, por el dinero que facilita al sector bancario), vuelva a crecer el rendimiento de las inversiones de las reservas de divisas.

A ello contribuirá, más que la elevación de los intereses efectivos recibidos en el exterior, el fuerte aumento de las reservas españolas, que se aproximaban a los dos billones de pesetas a finales de 1986 entre oro y divisas convertibles, y que en el presente ejercicio rondarán los tres billones de pesetas.

Paralelamente, también espera para este año una fuerte recuperación, hasta alcanzar o superar los niveles presupuestados para el año 1986, en los beneficios o participaciones recibidas de otros bancos oficiales, de Tabacalera y de la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre.

Del Banco Exterior de España, donde el Estado ostenta actualmente el 51,4% del capital social -el Instituto Nacional de Industria tiene otro 10%, y el Banco de España, un 7,7%-, se espera obtener un aumento de los beneficios del 39%.