Los Reyes inician en Tejas su recorrido por tres Estados norteamericanos de raíces hispanas

Los Reyes iniciaron ayer su gira de relaciones públicas e imagen de España en Estados Unidos por San Antonio (Tejas), una ciudad fundada en 1718 por los españoles como misión para cristianizar a los indios, presidio y base militar, y que es un recuerdo vivo, tres siglos después, del imperio que gobernaban desde Madrid sus antepasados. La visita de los Reyes, primera escala de una gira de una semana por tres Estados de raíces hispanas (Tejas, Nuevo México y California), duró siete horas, sin que en ningún momento se produjera un contacto de los Reyes con la población hispana, pero que se convirtió en el acontecimiento del domingo en la décima ciudad de EE UU.

Los Reyes fueron recibidos en la base militar de San Antonio por el alcalde de la ciudad, Henry Cisneros. Tocados con sombreros tejanos, los Reyes escucharon a una tuna que interpretó el pasodoble Que viva España. Cisneros, en una breve salutación, dijo: "San Antonio no existiría si no existiera España".La primera jornada de los Reyes en el suroeste de los EE UU, en una de las ciudades de mayor raigambre hispana del país, transcurrió en medio de la indiferencia popular. Sólo unos centenares de curiosos acudieron a ver a los Reyes ante el legendario fuerte de El Álamo, en el único acto programado como abierto a toda la ciudadanía. Esta ciudad, de casi un millón de habitantes, no alteró su plácido ritmo dominical por una visita muy poco anunciada y por una figura, el Rey, desconocida en estas tierras y cuyo papel público no se comprende.

Cisneros, que acompañó a los Reyes en su visita a San Antonio, es el más prometedor político hispano de EE UU y para el que algunos auguran una meta tan alta como la presidencia. Cisneros, de 40 años, el sábado, sin explicación alguna, dejó plantadas a la Prensa y a las autoridades españolas en una cena en la que él era el invitado de honor. Cisneros tuvo su tercer hijo el pasado mes de julio, al que bautizó con el nombre de Juan Pablo, por el Papa, y que nació con un grave problema cardiaco, lo que le ha hecho renunciar a la carrera para gobernador de Tejas, un Estado más grande que España y el tercero más poblado de la Unión, con 16 millones de habitantes.

"Queremos ver en esta visita nuestra unión espiritual y cultural, ininterrumpida a través de los siglos", afirmó don Juan Carlos en un almuerzo ofrecido en su honor en el Museo McNay, un bello edificio de sabor español mediterráneo, donde los Reyes pudieron admirar La niña con el sombrero de plumas, de Picasso, y obras de Cézanne, Van Gogh, Manet, Duffy y Matisse.

"Nos sentimos orgullosos de estos vínculos. Nuestro amor a la libertad, nuestro idealismo, la defensa de una universalidad en la afirmación de nuestra lengua y nuestra cultura son los principios que iluminaron el pasado y alumbran nuestro futuro", dijo el Rey, que concluyó brindando por "el futuro de la comunidad hispánica".

El Rey recordó al poeta norteamericano Walt Whitman, quien escribió que "para componer la identidad americana del futuro, el carácter español ha de suministrar varios de los ingredientes más necesarios. Ningún linaje proporciona una mirada histórica retrospectiva más grande por su patriotismo, valor, dignidad, gravedad y honor".

Los Reyes fueron saludados como los "monarcas de una nueva era". El diario local San Antonio Light, en un editorial, escribía ayer: "La bandera de España ondeó una vez sobre este Estado, y los españoles tuvieron una influencia poderosa en la formación de nuestra tierra, nuestra arquitectura y nuestras mentes. Nuestra historia es la suya".

Unas 1.000 personas, representación de la colonia española cuyo núcleo colonizador inicial vino de las islas Canarias, pudieron ver a los Reyes en el Instituo de Cultura de Tejas, su primera actividad pública tras su llegada a la base militar de Kelly, a las 10.45 (16.45 hora peninsular), con 45 minutos de retraso, procedentes de Nueva York.

Sólo por la tarde, en la visita al fuerte de El Álamo -en realidad una misión franciscana, donde 180 tejanos, con David Crockett al frente, fueron masacrados por las tropas mexicanas del general Santa Ana, en 1836- la población hispana pudo ver más de cerca a los Reyes. El Álamo está considerado la cuna de la libertad y la independencia de Tejas.

Los Reyes de España regresaron anoche a Houston, la capital tejana del petróleo, en el golfo de México, donde permanecerán dos días.