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Crítica:44ª MOSTRA DE CINE DE VENECIA
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

"Odiaba aquella escuela"

Au revoir les enfants cuenta la historia de un niño, Julien Quentin, que vive en un internado, alejado de París y de su familia, y que conoce y sufre la ocupación alemana a través de su amistad con un niño judío, Jean llonet. Es la primera película francesa de Louis Malle después de 13 años trabajando en EE.UU."Antes de empezar el rodaje de Aurevoir les enfants, vi Zero en conduite, de Jean Vigó. Se trata de un filme admirable, que me animó. El cine que se hizo durante los años treinta, las películas de Vigó o de Renoir, de un modo más claro aún, tiene la particularidad de describir muy bien la burguesía francesa de su momento. Ellos me dieron las ganas de hacer cine y son sus películas también las que me han inspirado ahora", afirmó el director sobre el filme.

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Au revoir les enfants es una historia personal. "Odiaba que me enviaran a aquella escuela, lejos de mi madre. Pero una vez allí, entre mis colegas, las cosas se veían de otro modo. En realidad entre los niños se establece también una relación de violencia dominada por la ley del más fuerte. Pero funciona. Es todo eso lo que he querido transmitir al espectador en la película".

Hay una declaración de amor hacia la madre: "Detesto a mi padre pero a tí de odio", dice el pequeño Julien al despedirse en la estación. "Sí, es evidente pero Au revoir les enfants es también el trasvase de este amor maternal hacia un amigo de la misma edad".

En los años sesenta, Malle recibió una carta de la hermana de Jean Bonet. Le pedía que hiciera un filme sobre Jean, alguien a quien ella no pudo conocer. "Entonces no quise abordar el tema. Intentaba precisamente todo lo contrario: enterrarlo. No ha sido hasta ahora que me he sentido capaz de hablar de algo que me conmocionó. Siempre pasa lo mismo. Ahora, al hacer el filme, me puse en contacto con aquella mujer. No pudo ayudarme puesto que no le había conocido (Bonet murió en un campo de concentración cuando ella era muy pequeña) pero le gustó mi trabajo. Sólo le disgustó que su hermano en la ficción no tuviera los ojos azules. Yo estoy seguro de que los tenía oscuros. Y es que la memoria es algo absolutamente resbaladizo".

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