Los 'doce', solidarios con Francia frente a Irán

Los doce respondieron ayer favorablemente a una modesta petición de solidaridad humanitaria y material formulada por Francia, que el pasado viernes rompió sus relaciones con Irán y cuyos diplomáticos y personal subalterno permanece retenido en el interior de su Embajada en Teherán.El titular danés de Asuntos Exteriores, Uffe Ellemann Jensen, que preside actualmente el Consejo de ministros de la CE, afirmó: "Brindamos a Francia todo el apoyo humanitario posible y nuestra colaboración para resolver los problemas prácticos" planteados por la salida de Irán de los diplomáticos galos.

Concretamente, según el jefe de la diplomacia española, Francisco Fernández Ordóñez, los doce se esforzarán por poder acceder a la cancillería francesa, donde está recluido su personal diplomático, cuya evacuación del país intentarán acelerar.

A lo largo del fin de semana, los embajadores en Teherán de Dinamarca, Bélgica y la RFA pidieron al Ministerio iraní de Exteriores, en nombre de la CE, que respete la Convención de Viena y en la práctica facilite la repatriación de los diplomáticos, pero las respuestas que obtuvieron no debieron ser demasiado alentadoras, porque Fernández Ordóñez declaró que "las dificultades siguen siendo obvias".

Estatuto diplomático

Italia está dispuesta a hacerse cargo de los intereses franceses ante Irán, pero su candidatura no ha sido aún aceptada por el Ministerio de Exteriores iraní, que insiste en que el traductor Wahid Gordji tiene estatuto diplomático, según el ministro luxemburgués Jacques Poos. [Por su parte, Fakistán confirmó ayer que ha recibido una petición de Irán para que vigile sus intereses en París, informa France Presse.] Las conversaciones "continúan su curso normal" en Teherán con las autoridades iraníes, sobre las consecuencias de tipo práctico provocadas por la ruptura de relaciones, según manifestó ayer un portavoz del Ministerio francés de Asuntos Exteriores. Mientras tanto, el Gobierno galo ha adoptado medidas de protección ante las amenazas tanto de Irán como de grupos proiraníes de Líbano.

"Estamos en situación de alerta número uno", declaró ayer el embajador de Francia en Beirut, Paul Blanc. París ha aconsejado también a los armadores que eviten la navegación por el Golfo.