IU pide que se anulen las pruebas de sociólogos municipales
El grupo municipal de Izquierda Unida (IU) en el Ayuntamiento de Madrid pedirá que el pleno de la corporación anule las oposiciones realizadas para cubrir ocho plazas de sociólogos en el Ayuntamiento. Sus solicitud se basa, según nota difundida ayer, en las irregularidades con que se han desarrollado las pruebas.
IU señala que las pruebas se realizaron entre el 26 de mayo y el 22 de junio pasados, período durante el cual uno de los opositores, Juan Antonio Ruiz Castillo, aprobado con el número 2, fue jefe de la oficina municipal de asuntos sociales y sindicales, además de supervisor todas las oposiciones convocadas por la corporación.
Ruiz Castillo fue elegido diputado socialista a la Asamblea de Madrid en las pasadas elecciones autonómicas.
IU añade que el presidente del tribunal de las oposiciones a sociólogos, el concejal Ramón Herrero, solicitó la dimisión y le fue aceptada por la comisión de gobierno el 25 de junio, cuando las pruebas ya habían finalizado. Además, añade la nota, en la misma reunión se ratificó un decreto del alcalde por el que se admitía la memoria "por ajustarse a lo establecido en las bases", presentada por el opositor Jaime Ferri que, en un principio, había sido rechazada por el tribunal.
La nota afirma que, según denunciaron varios opositores, un vocal del tribunal, el profesor de la universidad Complutense Rafael Bañón Martínez, impartió un cursillo días antes de las pruebas en el que se explicaron, al parecer, prácticas de exámenes de este tipo de oposiciones. "Cursillo al que casualmente sólo asistió buena parte de los que han sido finalmente aprobados", indica.
Tribunal soberano
Por su parte, el portavoz municipal Luis Larroque, explicó ayer las circunstancias en las que se habían realizado dichas oposiciones. Según Larroque, el tribunal fue soberano en la toma de decisiones sobre la evaluación de los 71 aspirantes. La presidenta del tribunal, la concejala Pilar Fernández, añadió que ella ocupó este puesto en sustitución de Ramón Herrero, concejal de Cultura, quien pidió a la comisión de gobierno ser sustituido al haber entre los aspirantes un familiar suyo."Cuando un tribunal se forma todos sus componentes tienen suficiente objetividad como para juzgar correctamente a los que se presentan. Es normal que en este tipo de oposiciones haya personas de la casa, puesto que buscan promocionarse. Eso no supone nada para el tribunal" comentó Larroque.
"La ley les ha concedido a algunos una valoración en puntos por su cometido en el ayuntamiento y eso hay que añadirlo a la valoración que obtengan en las pruebas. Curiosamente las tres personas que contaban con puntos añadidos no resultaron seleccionados. Además, hay que decir que la decisión del tribunal se hizo por unanimidad y que en este tribunal hay un representantes sindical", dijo.
