Guapos, ricos y famosos

El director de fotografía Juan Amorós se dirige con sus modales impecables a una joven que se considera after-punk y cuyo pelo ahuecado mide como poco 25 centímetros. "Señorita, podría usted ponerse un poco más a la derecha". Una discoteca. El encuadre está listo y aparece Victoria Abril, que obsequia a Antonio Valero con un beso a tornillo. La gente baila febrilmente, y esta pareja, cuyos componentes son guapos, ricos y famosos, intenta despistar a la Prensa del corazón. Se rueda El juego más divertido, una comedia que su director, Emilio Martínez Lázaro, define como "sofisticada".

Ada y Bruno, Victoria Abril y Antonio Valero, son los protagonistas de una famosa serie de televisión, Hotel de Fez, un melodrama de exóticos amoríos. La primera está casada con Díonis¡o (Santiago Ramos), guionista de la serie, y el segundo con Betty Ramírez (Maribel Verdú). Éstos mantienen una relación adúltera, y, sus respectivos cónyuges lo intentan, pero les es imposible porque son tan famosos que todo el mundo los reconoce en el momento más inoportuno. Además, llevan siempre pisándoles los talones a un sagaz reportero de la prensa del corazón, Ricardo Almonte (José Miguel Monzón, El gran Wyoming)."En la serie de televisión", explica Antonio Valero, "me paso todo el día en la cama con mi compañera de reparto, pero cuando queremos hacer lo mismo en la realidad, siempre dentro de la película, la cosa se complica".

Martínez Lázaro, de 42 años, que dirige con El juego más divertido su quinto largometraje, no utiliza referencias directas a la realidad. "Aquí los personajes son más blancos porque todo parte de una abstracción", dice. "Quiero hacer un tipo de comedia sofisticada a través de una historia muy banal, de amor y celos, expuesta en forma de adulterio". El drama ocurre en la serie de televisión, donde los personajes llegan al asesinato para poder amarse tranquilamente. "En la realidad está la comedia; todos son amigos y por eso los protagonistas tienen tantas dificultades. El final es feliz, o sea, un polvo grandioso".

Ejercer de necio

Antonio Resines y El gran Wyoming, actores básicamente de comedia, son dos de los personajes secundarios. Resines es en la ficción el productor de la serie, "un tipo muy buena persona", dice, "que quiere mucho a sus actores y se enfrenta a unos líos espantosos". El gran Wyoming va a la búsqueda de una exclusiva: "Soy un reportero que no se entera absolutamente de nada. Está en el centro del lío pero se acerca a la noticia por los lados. Ejerce de necio, es el tonto de la película, y creo que es un papel que me va mucho, está hecho a la medida de mi capacidad intelectual y moral".El gran Wyoming, un médico metido de lleno en el mundo del espectáculo, es un especialista en vacilar. "He hecho también las letras de las canciones que canta Victoria Abril la música la ha compuesto El Reverendo-: 'Al sentirte latir / tu pulso provoca en mí / el deseo incontrolado'. Acojonante, ¿verdad? Son letras muy serias, hechas ad hoc".

Victoria Abril rueda con El juego más divertido su cuarta película en lo que va de año; las otras han sido Las pistolas, de Félix Rotaeta, Barrios altos, de José Luis García Berlanga (hijo), y Camina o revienta, de Vicente Aranda. "Es la mejor actriz con la que he trabajado", dice muy serio Martínez Lázaro. Ella asegura que esta maratón le ha costado una anemia, y que en cuanto termine el rodaje se irá al campo a descansar "y a criar sangre". "En la vida real", dice, "nunca me ha pasado lo que en la película. Cuando salgo voy casi siempre hecha unos zorros y si quiero hacerme pequeñita para pasar desapercibida, lo consigo".

El juego más divertido es una producción de Cristina Huete y Fernando Trueba, cuenta con un presupuesto de 147 millones de pesetas y está subvencionada en un 50% por el Ministerio de Cultura.