La rebaja del IRPF será incluida en las negociaciones para la concertación social

El Gobierno someterá la rebaja del impuesto sobre la renta de las personas físicas (IRPF) a las próximas negociaciones para la concertación social hasta 1990, donde también planteará la necesidad de compensar los menores ingresos públicos que provoque dicha medida con una reducción de los gastos. Así lo anunció ayer el ministro de Economía y Hacienda, Carlos Solchaga, tras clausurar la 55ª asamblea de la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA), a la que anunció su disposición de autorizar a medio plazo la expansión territorial de las oficinas de este 40% del sistema financiero.

Poco antes de que concluyera el plazo para presentar las declaraciones positivas del IRPF de 1987, sobre cuyos resultados para las arcas del fisco dijo carecer de previsiones, Solchaga expresaba ante varios periodistas el propósito de negociar la anunciada reducción de las tarifas. Pero precisó que el Gobierno la aprobaría incluso en el caso "indeseable" de que no hubiera acuerdo de concertación social para el resto de la legislatura.Reveló el ministro que, paralelamente, el Ejecutivo propondrá a la patronal y los sindicatos una reducción de gasto público que neutralice los menorres ingresos fiscales derivados, de dicha medida. La iniciativa será presentada junto a las grandes cifras de los presupuestos del Estado para los tres próximos años, con el fin de que no afecte a las previsiones de paulatina reducción del déficit público.

La propuesta de nuevos tipos del IRPF irá acompañada también, según Solchaga, de una revisión de las deducciones. No quiso ampliar sus anteriores anuncios en el sentido de que la rebaja de la tarifa se extendería a toda la curva dibujada por los tipos y "podría ir más allá" de compensar los saltos desde un tipo a otro mayor por efecto de la inflación. Pero otras fuentes gubernamentales han apuntado que la nueva revisión de las deducciones irá en línea de acentuar la rebaja del tipo efectivo para las rentas bajas y de limitarla para las altas. Así, algunas de éstas últimas podrian terminar por pagar más que en la actualidad.

Previamente, en la asamblea general de la CECA, el ministro dijo que la vigente normativa sobre expansión de las cajas de ahorro fuera de sus regiones de origen no concuerda con la libertad de establecimiento dentro de la Comunidad Europea (CE) que deberá implantarse desde 1992, por lo que su clepartamento tiene el proyecto de modificar dichas normas "a medio plazo y vinculado a que termine el actual proceso de renovación de los órganos rectores en las cajas". Por las demoras que han provocado diversos recursos judiciales, sólo 35 de las 77 cajas han concluido una renovación abierta legalmente hace dos años.

Capitalización

El asunto de la expansión territorial apenas había sido tocado, ni por la asamblea ni por el previo discurso de despedida del presidente de la CECA, José Joaquín Sancho Dronda, quien sí se extendió en la creciente demanda de los actuales responsables de las cajas para convertirlas en el futuro en sociedades anónimas, sugerencia sobre la que no se pronunció Solchaga. A propósito de la petición de que se amplien los límites para la emisión de obligaciones subordinas para aumentar los recursos propios y la solvencia de las cajas, Sandro Dronda insistió que esto se había planteado "sin perjuicio de que vayamos estudiando algo que hoy nos parece extraño, pero que empieza a dejar de serlo en otros países, como es la transformación de nuestras entidades en sociedades anónimas para integrar un ahorro popular en lo que podríamos llamar capitalización también popular.