El PSOE inicia un debate para redefinir sus objetivos y recuperar la confianza de la sociedad en su proyecto

El Comité Federal del PSOE decidió ayer, a la vista del retroceso electoral del pasado 10 de junio, comenzar un debate interno destinado a "redefinir el proyecto socialista", que será presentado en el congreso del partido previsto para enero de 1988. Felipe González, que presidió la reunión, reconoció que una parte de la sociedad se ha apartado "de los objetivos de los socialistas", y defendió con persistencia la necesidad de que el partido socialista conserve la mayoría política, por considerar que su partido es el único que puede garantizar la modernización y la mejor incardinación de España en Europa.

Felipe González, que intervino al filo de las diez de la noche, después de más de cinco horas de debate y tras escuchar a 28 intervinientes, resaltó la necesidad de asegurar la competitividad de la economía española ante la concurrencia con los otros países de la CE y hacerla compatible con una política de solidaridad que favorezca a los más desfavorecidos.Esta tesis le servía para indicar que la política socioeconómica debe mantener los mismos objetivos, por considerarlos acertados y que darán sus frutos a medio plazo.

No obstante, González reconoció que un sector del electorado, a la vista de los resultados del 10 de junio, "se ha apartado de los objetivos del proyecto socialista"'. El presidente afirmó que el PSOE tiene que "redefinir" sus objetivos, de tal suerte que sean perfectamente comprensibles y resulten atractivos para los ciudadanos. Los seis meses que distan del 312 congreso federal serán aprovechados por los socialistas para concretar su proyecto político y presentarlo en enero de 1988 a la opinión pública.

A este respecto, el secretario de organización del PSOE, Txiki Benegas, señaló, en conferencia de prensa, que los socialistas, "en esta segunda etapa, van a realizar un esfuerzo complementario" para que los ciudadanos "identifiquen" sus objetivos. "Habrá que formular objetivos concretos en sanidad, educación, lucha contra la inseguridad ciudadana y mejora de los servicios", dijo Benegas.

Este responsable del PSOE aseguró que el comité federal no había asumido las críticas que "desde el exterior" se formulan a los socialistas respecto a que gobiernan con prepotencia y arrogancia. Si bien Felipe González, en la reunión, según algunos de los asistentes, señaló que, puesto que esta acusación ha calado en la opinión pública, el PSOE debe reflexionar sobre ello y mostrarse más abierto a la sociedad.

Durante esta larga reunión, Felipe González reconoció que para conseguir tanto las metas de la política socioeconómica del Gobierno como las de política sectorial no queda otro camino que alcanzarlas mediante la concertación social. González reiteró su llamamiento genérico, sin precisar fórmulas concretas, para el mejor entendimiento entre empresarios y sindicatos. A modo de advertencia, el líder socialista subrayó que uno de los factores que han contribuido a la pérdida de votos han sido las críticas al Gobierno, procedentes de la propia "familia socialista", lo cual ha restado credibilidad al partido.

La reunión comenzó con un análisis de las causas del declive electoral socialista, a cargo del vicesecretario general del PSOE, Alfonso Guerra. Entre otras causas, Guerra señaló el tratamiento que los medios de comunicación de titularidad pública habían dado al PSOE durante la campaña electoral.

Según Guerra, TVE discriminó al PSOE en los espacios informativos posteriores a los telediarios y permitió que dirigentes de partidos de la oposición que no eran candidatos para las municipales, autonómicas o al Parlamento Europeo aparecieran en pantalla censurando al Gobierno, todo ello en presencia de González, autor del nombramiento de Pilar Miró como directora general de RTVE.

Al término de la reunión del comité federal, que comenzó con un minuto de silencio en recuerdo de las víctimas del atentado perpetrado el pasado viernes por ETA en Barcelona, Txiki Benegas declaró que el máximo órgano del partido entre congresos había ratificado los criterios ante la próxima elección de alcaldes y presidentes de Gobiernos autónomos: asegurar la gobernabilidad y estabilidad de las instituciones y respetar el derecho a tomar la iniciativa para formar Gobierno por parte de los candidatos de la lista más votada.