El ahogado Joan Piqué negó ante el juez su implicación en la evasión de divisas

El abogado catalán Joan Piqué Vidal, defensor del presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, en el caso Banca Catalana y de otras personalidades de la vida pública catalana, como el presidente del Fútbol Club Barcelona, Josep Lluís Núñez, declaró ayer ante el juez de delitos monetarios, Rodolfo Soto Vázquez, en relación con un presunto delito de evasión de capitales descubierto en Barcelona, vía Andorra, y cuyo destino final era Brasil.Piqué permaneció por espacio de más de una hora en el juzgado, y a la salida manifestó a los informadores que había declarado como testigo y para aclarar las cosas ante su señoría. El abogado señaló que no era verdad que su despacho hubiera realizado diversas gestiones que concluyeron en la evasión delictiva y afirmó desconocer si las personas detenidas como presuntos autores del delito le han implicado en el mismo.

El letrado, que fue asistido en su declaración por el abogado Carlos García de Ceca, precisó que no podía decir nada, porque su declaración pertenece al secreto del sumario, y añadió que no tenía "ni idea" de si se habían descubierto los hechos, porque su línea telefónica estaba intervenida.

Fuentes jurídicas competentes manifestaron que Piqué, en su declaración judicial, reconoció que conocía a los detenidos por la evasión de divisas, pero que no tiene nada que ver con el asunto, y que no ha realizado gestiones de ningún tipo, porque su despacho se dedica únicamente a cuestiones penales y no actúa jamás en transacciones exteriores.

Estas fuentes, que prefieren mantener el anonimato, señalaron que la evasión "es de poca monta" y que pueden existir más implicados. De las pruebas existentes hasta el momento se desprende que Joan Solé, uno de los detenidos, evadía el dinero por la frontera de Andorra en paquetes de 10 millones de pesetas cada vez, que escondía en el maletero de su coche. Estos paquetes, según las mismas fuentes, eran entregados por otro de los detenidos, Juan Calvete, que, al parecer, era el encargado de buscar los clientes.

Aunque los indicios apuntan a que algunos contactos relacionados con el caso se efectuaron desde el despacho del abogado Joan Piqué, las fuentes citadas puntualizaron que no existen pruebas de la participación del famoso abogado barcelonés en los hechos delictivos.

La operación policial, desvelada hace unos días, originó la detención de cuatro personas, que posteriormente ingresaron en prisión. Se trata de los empresarios Juan Calvete Montoro, Enrique Marugán Giró y Lorenzo Rosal Bertrand, así como el veterinario Joan Solé Pons.