_
_
_
_

Barrantes deja de dirigir la izquierda peruana

Alfonso Barrantes Ligan, el líder máximo de la segunda fuerza electoral de Perú, Izquierda Unida (IU), renunció definitivamente a su cargo en la noche del sábado (madrugada de ayer en España), acosado por las críticas desde su propio frente, donde era considerado demasiado independiente y peligrosamente cercano al presidente Alan García, del partido Alianza Popular Revolucionaria Americana (APRA).

Tras siete años al frente de IU, durante los cuales fue elegido alcalde de Lima, el socialista Barrantes enfrentó dificultades insalvables con los dirigentes comunistas de su coalición.La aguda rechifla con que un grupo de militantes comunistas, participantes en el IX Congreso del Partido Comunista Peruano (PCP), recibió a Barrantes el miércoles de la semana pasada colmó la copa de las decisiones y abrió la crisis en el frente de izquierda peruano.

Tres pecados mortales habían determinado, en la segunda y tercera semana de mayo último, el destino de Barrantes, de 59 años, como presidente de Izquierda Unida (IU). El primero fue su reunión, sin permiso previo y en la propia casa de Barrantes, con el embajador norteamericano en Perú, Alexander Wattson. El segundo, su viaje a Bulgaria y a Francia sin consultar a la dirección de IU y en momentos en que se avecinaba el paro nacional sindical del 19 de mayo. A estos dos pecados de independencia e individualismo de Barrantesse agrega un tercero: el creciente disgusto de IU contra su posición conciliadora con el partido del Gobierno (el APRA), y, en especial, su estrecha amistad con el presidente Alan García. Este último pecado, el más grave, fue el que, a la postre, hizo estallar la crisis.

Las bases y dirigentes del PCP -uno de los siete partidos que conforman la IU- pretendían un duro enfrentamiento con Barrantes después de su reunión con Wattson. La noche del miércoles 27 de mayo, la militancia comunista peruana había decidido pedir la cabeza de Barrantes durante la apertura del congreso partidario, y la silbatina, dada su presencia en el recinto, fue ya el último detonante de la renuncia del dirigente.

El carisma de 'Frejolito'

"La izquierda es consecuencia y no vacilación", gritaban los comunistas -a un Barrantes tenso, solitario y desconocido. Frejolito, como es conocido aquí en referencia a una alubia morena que se consume con frecuencia en Perú, es un político de amplia trayectoria y prestigio como hombre de consenso. El carisma inteligente de este dirigente venido de la norteña provincia de Cajamarca ha dado a la tiesa política limeña no sólo un aire moderado en medio de una radicalización constante, sino también la gracia y agudeza del discurso y la personalidad. Muchos sectores le asignaban posibilidades de en cabezar la candidatura presidencial de 1990 al frente de una izquierda cuyo apoyo electoral ha fluctuado en los últimos años entre un 35% y un 30%.Su reivindicación de la "paciencia india" para enfrentar momentos difíciles tampoco fue un escudo ante el radicalismo que se insinúa en el seno de la IU y que, en sus declaraciones de renuncia, ha asimilado con las posiciones extremas de la guerrilla maoísta peruana Sendero Luminoso. ["Sendero Luminoso me ha ganado la batalla", dijo Barrantes a la agencia Efe poco antes de anunciar su renuncia. En su discurso de dimisión, Barrantes denunció la "disposición proterrorista" de algunos dirigentes radicales de su coalición, que, dijo, "se propusieron liquidarme políticamente"].

La acción de la izquierda en las últimas semanas ha estado centrada en el ataque frontal contra el Gobierno aprista de Alan García, que culminó con una huelga nacional sindical organizada con éxito el pasado 19 de mayo. La realización, pasado mañana, de un mitin general de la izquierda contra la acción del Gobierno aceleró también la crisis, en vista de la fuerte contestación que previsiblemente surgiría contra Barrantes cuando éste pronunciara su discurso.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_