Vidrié considera al caballo de rejones como la muleta del torero

El único espectáculo de rejoneo de la feria tendrá lugar- esta tarde en Las Ventas, ya que el anunciado para el pasado sábado 16 de mayo fue suspendido por la lluvia. El madrileño Manuel Vidrié, que es el único rejoneador que estaba en él cartel las dos tardes, encabeza el de hoy, en el que también figuran los sevillanos Curro Bedoya y Javier Buendía y el portugués Joâo Moura. Rejonearán toros afeitados de Luis Albarrán.Manuel Vidrié no comparte la opinión extendida en círculos taurinos de que el espectáculo de rejoneo es de segunda categoría: "Somos tan dignos como los toreros de a pie. Ellos utilizan la muleta y nosotros el caballo, que desempeña una función semejante". "Prueba de la importancia del rejoneo", señala Vidrié, "es que llenamos siempre las plazas".

"Chollo" para empresarios

Tampoco comparte las manifestaciones que hizo su compañero Antonio Ignacio Vargas, con motivo de su actuación en Las Ventas el día 16 de mayo, finalmente suspendida, en las que indicaba que los rejoneadores eran un chollo para los empresarios, pues abarrotan los tendidos, pero cobran mucho menos que los toreros de a pie. "Eso no es cierto", afirma; "nosotros cobramos los honorarios que creemos convenientes, sin fijarnos en lo que cobran los toreros, ni siquiera en el precio que los empresarios ponen a las localidades. El negocio taurino se basa en la ley de la oferta y la demanda, y hay que aceptar las condiciones vigentes".

Vidrié justifica el afeitado de los toros en estos espectáculos porque un caballo vale mucho dinero y no se puede ir dejando que los maten en el ruedo: "Una muleta se cambia por otra sin problemas, pero un caballo no. Ya se anuncia en los carteles que los toros no son en puntas. No se engaña a nadie". El madrileño finaliza su argumento señalando que hoy se rejonea mejor que nunca, gracias a que el riesgo para los caballos es pequeño. y que el público disfruta con unas suertes que no podrían hacerse siIps toros estuvieran en puntas.

Curro Bedoya, que lleva muchos años afincado en Madrid, coincide con Vidrié en los argumentos a favor del afeitado de los toros y discrepa con él en el tema de las ganancias que con los rejoneadores obtienen los empresarios taurinos. "Es cierto", comenta, "que somos un chollo para ellos, pero la solución pasa por unas mayores exigencias económicas en nuestros contratos, que de momento, debido a la desunión, no son posibles".