El comando responsable del triple atentado utilizó la infraestructura no desarticulada de ETA en Madrid

El comando responsable del triple atentado de ayer en Madrid utilizó la infraestructura aún no desarticulada de ETA en la capital de España, según fuentes policiales. La desarticulación del comando Madrid el 16 de enero pasado, permitió que los efectivos de seguridad neutralizaran la mayor parte de esta infraestructura, aunque no su totalidad. Fuentes de la Secretaría de Estado para la Seguridad, dependiente del Ministerio del Interior, insistieron ayer en su convicción de que el comando efectuó un traslado específico" para este atentado y que sus miembros llegaron "el día anterior".

Fuentes policiales señalaron que el atentado es obra de un comando de liberados -a sueldo de la organización- enviado por la dirección para efectuar este atentado. La propia consideración de ilegales -fichados por la policía- permite suponer a estas fuentes que "de inmediato abandonarán Madrid, sino lo han hecho ya a estas alturas"."Los reponsables del atentado de ayer han podido llegar el mismo sábado y huir tras la colocación de los explosivos" añadieron estas. últimas fuentes, que consideran que "independientemente de la brevedad de su presencia en Madrid, el comando ha tenido que apoyarse en alguno de los pisos de ETA en la capital de España, en parte de la infraestructura de la organización en Madrid".Fuentes de la Secretaría de Estado para la Seguridad descartan que la presencia de este comando suponga el inicio de una campaña de ETA en Madrid con la presencia permanente en la capital de activistas armados, similar a la efectuada por el último comando Madrid que hasta su desarticulación sembró el terror en la ciudad. "Para ello, deberían contar con miembros legales, desconocidos por la Policía", aseguran fuentes de este Cuerpo de Seguridad, que "permitiría actuar al comando con mayor libertad".

Un detalle importante

"Prueba de que ETA no cuenta con una importante presencia en Madrid, radica en el método del triple atentado de ayer", dijeron fuentes de la Seguridad del Estado. "Actuar contra un objetivo general, como pueden ser las sedes de la Guardia Civil o la de los cuarteles del Aire o de la Armada, y no concreto como un autobús con efectivos de los Cuerpos de Seguridad, revela que ETA carece del apoyo informativo con el que disponía" añadieron estas fuentes.Las mismas recordaron que el comando Madrid disponía de estudiantes vascos residentes en Madrid que empleaban gran parte de su tiempo para conocer trayectos y horarios de autobuses y convoyes. Estos estudiantes proporcionaban una cobertura "nada despreciable" según fuentes policiales, "a la organización terrorista".

Fuentes del Ministerio del Interior señalaron ayer a este periódico que los servicios de información españoles habían avisado de la posibilidad de un atentado en Madrid. "La falta de concreción temporal" ha impedido la neutralización del comando que actuó ayer en la capital de España.

Igualmente, expertos de la lucha antiterrorista, encuadrados en la Seguridad del Estado, habían avisado a los altos cargos del ministerio que tras la caida del comando Madrid, en enero pasado, lo "lógico era una respuesta de ETA en la capital".

La última campaña del comando Madrid se saldó con cinco guardias civiles muertos el 25 de abril de 1986 y los 12 del 14 de julio en sendos atentados en los que ETA empleó el método del coche-bomba. En el primero, tras una laboriosa laborde información, ETA atentó contra un Land Rover de la Guardia Civil.

El explosivo, compuesto por 20 kilogramos de Goma 2 y abundante tornillería, fue accionado mediante un mando a distancia. En el segundo, 50 kilos explotaron contra un convoy del mismo instituto armado. En esta acción también se utilizó el mando a distancia. Se trata del atentado más sangriento realizado por ETA en Madrid.

El 21 de julio pasado, el comando Madrid realizó su último atentado , y acaso el más espectacular, al atacar con lanzagranadas la sede del Ministerio de Defensa. ETA disparó 12 granadas anticarro contra el edificio del ministerio, situado en el Paseo de la Castellana. No se registraron víctimas mortales, pero si cuantiosos daños materiales.

Planes antiterroristas

El Ministerio del Interior desplegó durante esos meses -calificados de "muy duros" por un alto cargo- una imporante campaña de presencia policial en la calle y articulada en diferentes planes de seguridad. Dichas actuaciones se concretaban en un incremento del número de policías dedicados a labores antiterroristas y a la generalización de controles del tráfico. Varias operaciones especiales fracasaron antes de la desarticulación del comando Madrid por la escasez de verdaderas tareas de investigación realizadas por los policías.Sin embargo, la escasa operatividad de estos controles -tan sólo se detenían a delincuentes comunes- decidieron al ministerio a suprimir el pasado mes de abril estos planes antiterroristas y dedicar sus efectivos humanos a las diferentes operaciones antidrogas, conocidas como Operación primavera.