Implicaciones de la resistencia
Las amenazas de revelaciones espectaculares sobre las traiciones cometidas por altos dirigentes franceses durante la resistencia contra la ocupación alemana, proferidas por el ex comandante de la Gestapo Klaus Barbie y por su abogado defensor, Jacques Vergés, acaban de recibir un inesperado respaldo por parte de un experto norteamericano en la búsqueda de antiguos nazis.Según John Loftus, abogado de Boston y colaborador durante dos años de una oficina parlamentaria de investigación de las actividades criminales de los antiguos nazis, una de las grandes personalidades de la política francesa de este siglo estuvo en contacto con Klaus Barbie ya en 1943, pudo traicionar al héroe de la resistencia Jean Moulin y suministrar, en 1943, falsa documentación de la Cruz Roja al comandante nazi.
La personalidad acusada es André François-Poncet, embajador en Berlín en 1931, alto comisario francés en Alemania en 1949, embajador en Bonn en 1955, presidente de la Cruz Roja francesa y miembro de la Academia, fallecido en 1978.
Las revelaciones de Loftus no están acompañadas de ninguna prueba, han sido publicadas en el semanario alemán Stern, y han producido consternación e indignación en Francia, donde se recuerda que este mismo semanario publicó para su prestigio los falsos diarios de Hitler.
La Prensa francesa de estos últimos días anteriores a la apertura del proceso de Lyón subraya el tratamiento de los medios de comunicación alemanes del caso Barbie, que permite extraer la impresión de que es un auténtico proceso a la resistencia y a la colaboración.
El hijo de la personalidad salpicada por las revelaciones de Loftus, el ex ministro de Asuntos Exteriores Jean-François Poncet, ha desmentido formalmente todas las acusaciones. La oficina norteamericana para la que trabajó Loftus está en el origen de la mayor parte de las expulsiones de antiguos nazis de Estados Unidos.
La traición de Caluire
La aparición en el proceso a Barbie de revelaciones excepcionales sobre la llamada traición de Caluire es una de las cuestiones que mantiene en vilo a la opinión pública francesa.
En el pueblo de Caluire, en las afueras de Lyon, fue detenido Jean Moulin, como consecuencia de una delación que nunca pudo ser aclarada.
Aunque la detención y muerte de Moulin no entra en la acusación-contra Barbie, pues no está codsiderada como crimen contra la humanidad, sino como crimen deguerra, la defensa del ex comandante de la Gestapo quiere evocar los hechos para demostrar que su defendido era un funcionario que cumplía sus obligaciones, mientras que algunos de los grandes resistentes fueron unos traidores.
Una de las hipótesis que intentará demostrar Vergés es que uno de los jefes de la red de resistentes Combat permitió la caída de Moulin, con quien mantenía profundas divergencias políticas y de quien temía un deslizamiento hacia posiciones comunistas al final de la guerra.
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