El teólogo Hans Küng critica la política de nombramientos de obispos del Vaticano

El teólogo suizo Hans Küng, que dirige el Instituto de Teología Ecuménica de la universidad de Tubinga, ha criticado la política del Vaticano respecto al nombramiento de obispos en Europa, especialmente en Holanda, España y Austria, y en América Latina. En una entrevista concedida a Efe, Küng censuró, además, la conducta del papa Juan Pablo II durante su reciente visita a Chile y, por otro lado, las distintas valoraciones que hace el pontífice del, general Augusto Pinochet, presidente de Chile, y sacerdotes como Ernesto Cardenal, ministro de Cultura de Nicaragua.

"El Vaticano está nombrando a obispos conservadores e incompetentes en España y Latinoamérica, y con esa política preconcebida por la Santa Sede pretende retrotraer a la Iglesia católica a una situación preconciliar destacó el teólogo, que asiste en Colonia a una reunión de la llamada Iglesia de abajo, convocada por 65 grupos católicos de base."Este camino", dijo, "va en detrimento de la unidad de la Iglesia católica, pues una política de esta naturaleza llevó a la ruina a la Iglesia católica de Holanda" y "signos semejantes se observan también en la de Estados Unidos".

El intento simultáneo del Vaticano de censurar a obispos progresistas tiende a polarizar a la Iglesia católica, una situación que se observa cada día con mayor intensidad en la República Federal de Alemania, país donde hay una "Iglesia oficial y una gran masa de católicos que no comparte las posiciones de la jerarquía".

"En este contexto hay que ver", explicó Küng, "el conflicto del Vaticano con la teología de la liberación, dado que Ia Santa Sede había lanzado una ofensiva contra los teólogos de la liberación, con el fin de evitar que cardenales, obispos y gran parte del clero, especialmente en Brasil, avanzaran por las vías de las reformas del Concilio Vaticano. Esta política tiene por objeto, según Küng, impedir que los cristianos tomen partido de forma decidida por las causas sociales.

Sobre la reciente visita del Papa a Chile, el teólogo manifestó su "profunda decepción debido a que Juan Pablo II no expresó allí una condena clara y dura respecto a los atropellos a los derechos humanos que se cometen en Chile". A manera de ilustración, indicó que "ahora el mundo tiene dos fotos en la memoria: una del Papa con el dictador Pinochet en el Palacio de la Moneda, de Santiago, y otra, la de Juan, Pablo II levantando los dedos en forma amenazadora contra Ernesto Cardenal en Nicaragua". Esto demuestra para Kün1 que en el Vaticano existen "dos tipos de valoraciones: una dura para sacerdotes como Cardenal y otra blanda, para dictadores como Pinochet".