El Gobierno descarta aportar al Congreso detalles de la negociación con EE UU sobre las bases

El Gobierno se ceñirá mañana en el debate sobre paz y seguridad a la "recapitulación" de hechos conocidos, así como al análisis de las tres condiciones aprobadas en el referéndum no realizará a Estados Unidos para reducir la presencia militar norteamericana en España. "No podemos dar información que ponga en peligro el final de las negociaciones", dicen fuentes de la Presidencia del Gobierno.

Las fuentes consultadas, tanto gubernamentales como parlamentarias, coincidieron en señalar que el debate que se celebrará mañana en comisión, protagonizado por los ministros de Asuntos Exteriores y de Defensa, Francisco Fernández Ordóñez y Narcís Serra, respectivamente, no debe despertar "altas expectativas", dado que, el Gobierno se limitará a realizar "una recapitulación" de hechos ya conocidos. "Se trata fundamentalmente de analizar el grado de cumplimiento de las tres condiciones que fueron aprobadas en el referéndum sobre la OTAN, y la conclusión es que se están cumpliendo", dijeron estos portavoces.El primero de los elementos de la consulta fue el compromiso de no integrar a España en la estructura militar de la OTAN, y esta voluntad persiste, aunque aún sin concretar, según se reconoce en el propio documento enviado por el Gobierno a las Cortes como paso previo al debate. "El Gobierno propicia un esquema de participación en la Alianza Atlántica en base a unos principios, propuestos por España y aceptados por los países aliados, cuya concreción está siendo objeto de estudio y discusión", señala el texto.

La reducción de las bases norteamericanas era el siguiente aspecto. En este apartado es donde las fuentes gubernamentales reconocen que los ministros no podrán dar una información exhaustiva. "No podemos poner en peligro el curso de las negociaciones ofreciendo más información", aseguraron. Esta impre sión coincide con las declaracio nes del vicepresidente del Gobierno" Alfonso Guerra, a este periódico en la edición del domingo pasado.

A la pregunta, de si el Ejecutivo está decidido a que los aviones F-16 abandonen España en cualquier circunstancia, el vicepresidente respondió: "Eso no lo voy a responder, porque sería tanto como dar a conocer a los americanos, fuera de la mesa de negociación, lo que están deseando saber en ella". El Gabinete socialista afirma que la propuesta que ha realizado a los norteamericanos es "moderada, flexible y realista". Los mismos portavoces indican que, si "la oposición fuera prudente y sensata, no preguntaría por nuevos datos de la negociación".

No estaba previsto

"El no almacenamiento de armas nucleares en territorio español se está igualmente cumpliendo", dijeron las fuentes informantes, que no ocultaron la intención gubernamental de utilizar en el debate la reciente remisión a las Cortes para su ratificación del Tratado de No Proliferación de Armas Nucleares.

El Gobierno no tenía previsto realizar este debate, que había sido solicitado profusamente por la oposición desde el pasado mes de septiembre. La razón que ahora se reconoce es que "no había datos nuevos". En el debate sobre el estado de la nación del pasado mes de febrero, los diferentes grupos políticos, de forma insistente el CDS, PDP e Izquierda Unida, lo demandaron nuevamente, y para ello presentaron una moción, que fue aprobada por toda la Cámara.

Datos nuevos

"¿Hay datos nuevos?", se pregunta un portavoz gubernamental, que se la siguiente respuesta: "Depende de lo que quiera la oposición. Si quiere hablar sobre todos los temas de política exterior y de defensa, pues merece la pena realizar una recapitulación; ahora, si se reduce a la negociación con los norteamericanos y a la forma de integración en la OTAN, entonces habrá frustraciones. Vamos a dar toda la información posible, pero siempre, cuidando que no se deteriore el buen final de la negociación". Estos portavoces concluyen que la materia de este debate "no está en la calle".

El Gobierno español, para cumplir su objetivo prioritario de preservar la paz y garantizar la seguridad, proyecta su política en la defensa, disuasión, desarme y distensión.

El Ejecutivo se siente orgulloso del papel que España desempeñó en la reunión de Madrid de la Conferencia Europea de Seguridad y Desarme (C. S. C. E. ), "que permitió la posterior celebración de la Conferencia de Estocolmo sobre las medidas de confianza y el desarme en Europa", dice el documento gubernamental previo al debate de mañana enviado a las Cortes.

El Gobierno espera contar con el apoyo de los grupos parlamentarios en su política exterior. "Aprobados en referéndum los principios básicos de la política de seguridad, está abierta la posibilidad de que las fuerzas con representación parlamentaria alcancen un mayor grado de consenso en el desarrollo de las grandes líneas de esa política de paz y seguridad para nuestro país". Es el propósito gubernamental.

Los portavoces de la oposición, a la vista de la comunicación recibida, albergaron serios temores respecto a la información que el Ejecutivo iba a ofrecerles en el debate de seguridad.