Paro del sector hostelero de Albacete contra las inspecciones fiscales

La mayoría de los aproximada mente 1.200 establecimientos de hostelería de la provincia de Albacete cerró durante el día de ayer como protesta contra el modo como la delegación de Hacienda ha venido realizando en las últimas semanas sus inspecciones en el sector hostelero. En la capital y las poblaciones más importantes el paro fue total y nadie pudo a lo largo de la jornada tomar un café o una cerveza, salvo que lo hicieran en su casa.Hacienda ha venido utilizando para esta labor a funcionarios contratados y no a inspectores profesionales, que hacían aparición en bares, cafeterías y restaurantes y, colocándose ante la barra, permanecían de cuatro a cinco horas, muchas coincidiendo con los momentos de más trabajo del establecimiento, en actitud fiscalizadora, controlando el negocio, tomando nota de todas las ventas que se producen en ese período, pidiendo tickets a los clientes o vigilando las máquinas tragaperras.

Esta actitud, según los empresarios, llegaba a crear una verdadera tensión en los locales, aparte de obstaculizar el trabajo en muchos casos. Hacienda ha logrado de este modo lo que tantas veces se cernía como una amenaza sobre la hostelería durante las tensas negociaciones de convenios: la huelga general en el sector.

Los empresarios, tras manifestarse en las calles de Albacete, entregaron un escrito al delegado de Hacienda en el que se contienen las quejas por el método de inspección, que consideran de una tensión y una presión innecesarias, puesto que en ningún momento ha existido una negativa a colaborar.

Pedro Andrés Cuesta, presidente de la Asociación de Hostelería de Albacete, manifestó que tanto la manifestación como el cierre de comercios habían sido un éxito, y no descartó un cierre de mayor duración si Hacienda no rectifica la forma de realizar las inspecciones.

Las discotecas y salas de fiestas de la provincia se sumaron al cierre de protesta. La Federación de Empresarios de Albacete, por su parte, hizo público ayer un comunicado en el que se solidariza con los hosteleros.