Antonio Drove rueda 'El túnel', una adaptacion fiel de la obra de Sábato
La obra El túnel, escrita por el argentino Ernesto Sábato en 1948, ha sido adaptada al cine con total fidelidad a la novela, cumpliendo así un de las condiciones impuestas por su autor. La película, que estos días se rueda en Madrid, está siendo dirigida por Antonio Drove e interpretada por Jane Seymour (María Iribarne) y peter Weller (Juan Pablo Castel), junto a Fernando Rey, Antonio Ferrandis y Lola Forner. El filme ha sido producido por Arturo Feliu, quien ha invertido 300 millones, de los que 90 han sido adelantados por el Ministerio de Cultura.
El rodaje de El túnel comenzó hace unas cuatro semanas en el norte de España, cerca de Santillana del Mar, y concluirá dentro de un mes en Buenos Aires. Su estreno está previsto para finales de año y su distribución está ya comprometida en Estados Unidos y Canadá. En Madrid el equipo ha estado dos días trabajando en el Círculo de Bellas Artes para rodar la escena en la que María Iribarne toma contacto por primera vez con el pintor Juan Pablo Castel en una exposición de éste. A partir de aquí comenzará la tortuosa relación entre ambos personajes, que concluirá trágicamente.La estrella de la escena de la exposición -y de toda la película- es la actriz británica Jane Seymour, de 36 años, conocida entre los españoles como chica Bondy protagonista de varios seriales televisivos. Aquí pasea su fría y muda belleza delante de un cuadro en una escena que repite una y otra vez sin alterar el gesto ni mover un solo músculo de la cara. De ella y de su figura menuda está pendiente todo el equipo. Es también ella la que disfruta de un cachet más alto, aunque el productor prefiera no precisaría cantidad. Antonio Drove, el director, dirige el movimiento de las cámaras con una concentración tal que le impide dedicar unos minutos para hablar con los periodistas.
Mientras el equipo trabaja hasta lograr la toma definitiva, el productor Arturo Feliú, español de origen chileno, explica la s vicisitudes por las que ha tenido que pasar durante los últimos cinco años hasta lograr que Ernesto Sábato aceptara vender los derechos de su novela. "Éramos muchos los productores interesados en comprar esos derechos que hemos ido sorteando la desconfianza de Sábato. Él exigía conocer antes el guión, al director y que el nivel de la película cumpliera unos mínimos".
Curiosamente, sólo en el caso de que Víctor Erice hubiera dirigido la película no hubiera tenido Sábato nada que objetar. Sin embargo, el director de El Sur no llegó a decidirse a llevar esta famosa novela al cine.
El guión que finalmente aceptó el escritor argentino esobra de Carlos Alberto Cornejo y Agustín Mahieu. "Al final, tanto Drove como yo", asegura el productor, "intervinimos directamente en la adaptación. La solución final consistió en que la película arranca con un periodista exiliado que regresa a Argentina en 1986 y que, frente, a miles de criminales sin rostro, decide investigar un crimen humano. Encuentra un manuscrito, y a partir de ahí empieza la narración lineal y en primera persona de El túnel, tal como la escribió Sábato.
Para que Sábato aceptara, a Drove como director también hubo dificultades. Dado que inicialmente rechazó recibirle, el productor provocó un encuentro fortuito entre ambos en Buenos Aires sin que Sábato supiera que hablaba con Drove.
Éste abordó al escritor hablando de El túnel como de una partitura musical, comparación que fascinó al escritor argentino hasta el punto de que aceptó que su obra fuera llevara al cine, En la parte final del rodaje, que se efectuará en Buenos Aires, tendrá la posibilidad de supervisar personalmente la marcha de la película.
Babelia
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