La patronal bancaria critica a Economía por no subir los tipos de interés

El presidente de la patronal Asociación Española de Banca (AEB), Rafael Termes, se alineó ayer con la postura del Banco de España sobre los problemas de control monetario existente y criticó la forma "no ortodoxa" que viene utilizando el Ministerio de Economía y Hacienda para financiar el déficit del sector público. Para Termes, los problemas monetarios actuales se deben a que el Tesoro no quiere pagar por los fondos que necesita los precios que establece el mercado, y ello está repercutiendo sobre el resto de los precios de los créditos al sector privado de la economía.La asamblea anual de la AEB, celebrada el pasado martes, se limitó a la aprobación de los presupuestos de la asociación para este año y la lectura del informe de su presidente, que hizo especial hincapié en los problemas a los que se enfrenta la economía española en 1987 y que señaló que "resulta obligado proceder auna revisión de las previsiones gubernamentales, dotándolas de mayor realismo", a la luz de la evolución de los primeros meses del año. Termes explicó posteriormente en conferencia de prensa que el Ministerio de Economía ya ha reducido sus objetivos de crecimiento del 3,5% al 3% del producto interior bruto, y que las previsiones de inflación, acabar el año en un 5%, pueden cumplirse todavía "si se contie.nen los elementos salariales en torno al 5% propiciado por el Gobierno".

Las tensiones monetarias que tienen lugar desde primeros de año, y que han ido acentuándose a lo largo de las últimas semanas, tienen su origen, según Rafael Termes, en el elevado déficit del sector público, y sobre todo en la manera de financiarlo que se ha elegido este año. Para el presidente de la patronal bancaria, los problemas surgen cuando el Tesoro decide no financiarse mediante emisiones de títulos a precios de mercado, sino que, parano elevar forinalmente sus costes finarcieros, lecide aumentar el recurso al Banco de España, que, a su vez, tiene que retirar cantidades crecientes de dinero de bancos y cajas de ahorro.

Mientras que en los primeros meses de 1986 el Tesoro realizó emisiones de pagarés por un importe tal que le permitió no sólo atender a sus pagos, sino reducir su recurso al Banco de España en 330.000 millones de pesetas, en lo que va transcurrido de año la situación ha cambiado radicalmente y el banco de España ha tenido que adelantar casi 500.000 millones de pesetas a la Hacienda Publica. Ello explica, según Termes, la mayor parte de los desequilibrios monetarios que se han traducido en una elevación de los tipos de interés, una entrada de divisas muy elevada y todos los procesos de restricción monetaria que aplica el Banco de España y repercuten directamente sobre los precios de los créditos al sector privado.

En estas condiciones, señalóTermes, las previsiones de baja de tipos de interés se alejan por lo menos hasta finales de año, y ello puede provocar una recesión de la economía, al disminuir la inversión y el consumo, con la consiguiente pérdida de empleo para el conjunto del año.