Exposición de pintores rusos del siglo XIX en el palacio de Villahermosa
La muestra incluye 56 obras de 41 artistas
Las salas de exposiciones temporales del palacio de Villahermosa, dependiente del Museo del Prado, exhiben desde hoy una exposición de pintores rusos del siglo XIX, con fondos procedentes del Museo de Arte Ruso de Leningrado. La muestra pretende dar a conocer la proximidad de estos artistas a los grandes maestros europeos del momento, y concretamente a los grandes pintores españoles. Las ciudades de Moscú y Leningrado ofrecerán próximamente una muestra de pintura española que abarcará desde Goya hasta Picasso.
La exposición está integrada por 56 obras realizadas por 41 pintores, y en ella se parte con obras de retratistas de finales del siglo XVIII hasta acabar con trabajos representativos de creadores vanguardistas de principios del siglo XX.En opinión de Alfonso Pérez Sánchez, director del Museo del Prado, la sorpresa más honda para el visitante español esta muestra estará "en descubrir que el espíritu y las formas de los artistas de la remota Rusia no son distantes, sino entrañablemente próximos, a los de nuestra propia España, que vivió a lo largo del siglo XIX una evolución y unas tensiones internas en cierto modo paralelas a lo que los artistas rusos vivieron y plasmaron en los mismos años". Esta, exposición que hoy se inaugura es producto del intercambio de la muestra española, semejante en número de piezas y calidad a la que se exhibirá en las ciudades de Moscú y Leningrado sobre la pintura española desde Goya hasta Picasso.
V. Leniashin, director del Museo de Arte Ruso de Leningrado, persona encargada de seleccionar la colección de pinturas que desde hoy se exhibe en Madrid, considera que el visitante de la muestra podrá formarse una idea del arte ruso y de sus diferentes movimientos pictóricos. Para ello ha escogido obras maestras de autores de la época de Pedro I, tales como Borovikovski o Briulov, hasta Levitan, Gue y Kustodiev, como prototipos de creadores que asimilaron las tendencias europeas del momento. El responsable de la pinacoteca de Leningrado ha incluido también obras de Kramskoi, Repin y Serov, para quienes las obras de Velázquez tuvieron una importancia muy especial.
Un apartado importante de esta exposición está integrado por obras ligadas a la llamada pintura nacional, en la que se tratan temas de la antigua Rusia, sus problemas sociales o la concepción nacionalista de la historia y del hombre. El escrupuloso trato dado a los colores y la reproducción de los tonos de la naturaleza que pueden verse en obras como Pastorcillo durmiendo o Los segadores, de Venetsianov, son las características artísticas de la creatividad pictórica de las piezas incluidas en este apartado.
Realismo
El realismo ruso ha sido uno de los temas que más artistas han sido capaces de aglutinar. Para ilustrar esta etapa hay obras de Fedotov, Perov, Solomatkin, ZhuravIev, Savrasov, Vasiliev, Kulndzhi, Polenov, Zhukovski y Levitan.Las últimas tendencias surgidas en la pintura de los primeros años del siglo XX están representadas con obras de Kustodiev, Goncharova, Mashkov y Grigoriev. Todos estos trabajos tienen como punto común de inspiración las diferentes fuentes folclóricas vinculadas a expresividad más intensa del lienzo. Respecto a los creadores de este período, el director de la pinacoteca de Leningrado señala que fueron capaces de hacer un arte espiritualizado.
Respecto al momento actual de la pintura soviética, no representada en esta muestra, el director del museo de Leningrado precisó ayer a Efe que "la apertura política de su país probablemente tendrá una influencia grande en el arte, reflejo de su modo de vida".
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