Weinberger confía en una solución en las negociaciones de la reducción de las bases
El secretario de Defensa norteamericano, Caspar Weinberger mostró ayer su esperanza de encontrar una solución satisfactoria en las negociaciones sobre la reducción de la presencia militar norteamericana en España, pese a la existencia de "algunas discrepancias". Aunque sin citarlas, Weinberger se refirió a las diferencias que mantienen bloqueadas las negociaciones por la posición española exigiendo la salida del territorio nacional del Ala Táctica 401, integrada por 72 cazabombarderos F-16 estacionados en Torrejón.
Por su parte, el ministro de Defensa, Narcís Serra, admitió que tras la visita del jefe del Pentágono las posiciones de España y EE UU "no se han acercado lo suficiente".Weinberger destacó la gran importancia para la seguridad occidental que da Estados Unidos a los citados F-16, "los mejores y más avanzados aviones de combate del mundo", y señaló que no le cabía "la menor duda" de que la parte española tenía "una total comprensión" sobre la importancia que tiene la presencia de esos aviones en Torrejón.
Weinberger expresó "el alto grado de coincidencias y la conciencia común de la importancia que tiene preservar la fuerza y la seguridad occidental", y agregó que tenía "muchas esperanzas de que, en último término, los negociadores podrán llegar a un acuerdo satisfactorio".
En conferencia de prensa celebrada ayer en Madrid antes de continuar su periplo por varios países del flanco sur de la OTAN, el jefe del Pentágono se negó en varias ocasiones a responder preguntas sobre detalles concretos de las negociaciones sobre la reducción de las bases, insistiendo en que ése no había sido el objeto de su visita a Madrid, y remitiendo la responsabilidad de tales negociaciones al embajador de EE UU en España, Reginald Bartholomew, a quien calificó en varias ocasiones de "nuestro muy competente embajador".
El jefe del Pentágono eludió el tema de las discrepancias hispano-norteamericanas y en concreto la retirada de los F-16. A cualquier referencia sobre esos puntos, Weinberger respondía sistemáticamente aludiendo "a la importancia y la seguridad occidentales, y lo que aporta la alianza de la OTAN al respecto para todos sus miembros". "Creo que las relaciones defensivas entre España y Estados Unidos tienen tantas facetas que no sería correcto insistir demasiado en ningún aspecto en particular", añadió.
"Similitudes"
Weinberger añadió que le había llamado la atención "la similitud de algunas de las posturas entre los dos países". "Encuentro que tienen mucho interés en preservar la fuerza de la Alianza y la seguridad de los dos países, así como de la Alianza".Sobre la importancia que tienen los 72 cazabombarderos F-16 para la seguridad occidental, Weinberger dijo: "No me cabe la menor duda de que exista pleno entendimiento de la importancia de la contribución a la seguridad occidental de 72 de los mejores y más avanzados aviones de combate del mundo. Creo que hay una total comprensión en esto", añadió.
Sobre la eventualidad de un traslado de los F-16 a otros países, como Turquía, Portugal o Marruecos, Weinberger respondió: "Desde hace mucho tiempo no contesto a las preguntas hipotéticas, así que sólo voy a decir que no estamos negociando con ningún otro país".
Weinberger no quiso dar detalles sobre la propuesta norteamericana de trasladar los F-16 de Torrejón de Ardoz a Morón, y dijo que ésa es una de las varias propuestas que han sido tratadas en las negociaciones. "Hemos tratado sobre la importancia de preservar la fuerza y la seguridad occidentales al nivel más alto posible", respondió Weinberger.
Fuentes oficiales españolas cercanas al proceso negociador destacaron ayer, como balance de la visita del secretario de Defensa norteamericano, que lo más importante había sido la actitud de firmeza y la unanimidad sobre la posición negociadora española que había podido observar en Madrid.
