El MOPU y la Generalitat negocian las obras del delta del Ebro

El Ministerio de Obras Públicas y Urbanismo (MOPU) y el Departamento de Política Territorial y Obras Públicas de la Generalitat negocian la financiación del plan de obras de mejora de la infraestructura hidráulica del delta del Ebro, que representa una inversión de 12.160 millones de pesetas. La aprobación previa de este plan es una de las condiciones exigidas por las entidades que han presentado alegaciones a la solicitud de un caudal de cuatro metros cúbicos por segundo para el minitrasvase del Ebro. El plazo para la presentación de alegaciones finalizó el 22 de enero.

La autorización de la concesión está pendiente todavía del informe jurídico de la Confederación Hidrográfica del Ebro, que deberá resolver sobre las 20 alegaciones, presentadas, con independencia de los recursos contenciosos interpuestos.El proyecto del Plan de Obras para el Acondicionamiento y Mejora de la Infraestructura Hidráulica del Delta del Ebro podría ser aprobado en el plazo de dos meses, según ha manifestado a este diario el director general de Obras Hidráulicas, Juan Rodríguez de la Rúa.

Las obras del proyecto, cuya inversión total es de 12.160 millones de pesetas, fueron iniciadas por el MOPU, que ya ha invertido en ellas un total de 4.311 millones de pesetas. La inversión restante, de 7.849 millones de pesetas, corresponde ejecutarla a la Generalitat, que ya ha aprobado expedientes de contratación por un valor de 3.700 millones de pesetas.

El debate entre el MOPU y la Generalitat, que llevan varios meses sin alcanzar un acuerdo, gira en torno a los sistemas de financiación de estas obras. La fórmula barajada para el caso del minitrasvase del Ebro prevé que la Administración (el Estado y la Generalitat) financie a fondo perdido el 30% de lo que ha aportado, y que el 70% restante lo recupere mediante el cobro de un canon de 7,2 pesetas el metro cúbico sobre el agua que se derive por el minitrasvase a Tarragona. Es decir, el MOPU debería recuperar el 70% de lo aportado (3.017 millones de pesetas) y, a su vez, la Generalitat, el 70% de lo que invierta, que, según lo previsto, significa unos 5.500 millones de pesetas.

En total, las administraciones tienen que resarcirse de unos 8.500 millones, lo que resulta muy improbable dada la escasa capacidad recaudatoria del canon, que apenas alcanza los 300 millones de pesetas anuales (42 millones de metros cúbicos a 7,2 pesetas cada uno). Hasta el momento, la Generalitat y el MOPU no se han puesto de acuerdo en el reparto de estos ingresos.

El temor de Aragón

Fuentes del Departamento de Política Territorial y Obras Públicas y Urbanismo de la Generalitat manifestaron que "todavía no habían adoptado ninguna posición al respecto por estar pendientes de conocer la propuesta del ministerio".El departamento de Obras Públicas de la Diputación de Aragón ha solicitado que, previamente a la concesión, se apruebe por el MOPU el plan de obras del delta, que deberá contener una definición concreta de las obras a realizar y un plazo para su financiación. También señala que "la concesión requiere la recuperación de caudales y la simultánea reducción, en caudal equivalente, de los consumos anuales de los canales del delta".

Amador Ortiz, consejero de Obras Públicas de la Diputación General de Aragón, ha señalado que es necesario cuantificar el volumen de las obras, ya que sí no "con el canon se podría estar financiando la mejora del delta indefinidamente". "Consideramos", añadió, "que una vez pagadas estas obras de mejora en el delta, los ingresos que proporcionará el canon deben repercutir en beneficio de toda la cuenca".

Albert Vilalta, presidente del Consorcio Concesionario de Aguas para los Ayuntamientos e Industrias, afirma que en este caso se trata de una concesión especial.

Según Vilalta, "la concesión ya se otorgó por ley, y ahora sólo hace falta la fecha de la misma, que es una cuestión procedimental". Vilalta ha precisado que "las obras se iniciarán hacía abril, coincidiendo con la obtención de la concesión, aunque para ganar tiempo ya se han iniciado los trámites de la adjudicación".

Fuentes del MOPU han señalado que por ser una concesión que afecta a aguas que se trasvasan de una a otra cuenca, la decisión final será resuelta seguramente por el MOPU.