Don Juan Carlos recibe a Achahbar, general marroquí del entorno de Hassan II

, El rey Juan Carlos recibió en audiencia a última hora de la tarde de ayer al jefe administrativo de los ejércitos marroquíes, general Mohamed Achahbar, hombre de confianza del monarca alauí, Hassan II. La visita ha sido la primera que un alto cargo del país vecino realiza a España después de que Hassan II hiciera la pasada semana un llamamiento para negociar conjuntamente una solución al conflicto de Ceuta y Melilla. Aunque no hubo información oficial española al respecto, es probable que don Juan Carlos entregara a Achahbar un mensaje para Hassan II.

Junto con Achahbar, acudieron ayer al palacio de la Zarzuela el agregado militar de la embajada de Marruecos en España, coronA mayor del Aire Mohamed Temsamani, y el embajador de España en Marruecos, Joaquín Ortega. Ninguna fuente oficial consultada concretó el motivo de la visita oficial de Achahbar a Madrid. El general se había entrevistado por la mañana con el director general de Política de Defensa, general Francisco Veguillas.

En medios de Defensa, se aseguró que la presencia de Achahbar en España en el departamento era "un contacto más" entre las autoridades militares españolas y marroquíes, "dentro de la amplia colaboración que ambos países mantienen".

Exteriores, al margen

Por su parte, un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores aseguró que este departamento no había participado directamente en la organización de la visita y que, de hecho, no disponían de un programa oficial sobre la actividades del general marroquí en Madrid.El pasado día 20, el ministro del Interior, José Barrionuevo, fue recibido por Hassan II, quien le entregó un mensaje para el rey Juan Carlos, en el que proponía crear una comisión conjunta sobre.la cuestiónde Ceuta y Melilla. Cuando Barrionuevo regresaba a Madrid, y antes de haber podido comunicar el mensaje a su destinatario, medios informativos de Rabat difundieron oficialmente el contenido del mensaje, lo que causó malestar en Madrid.

A partir de ese momento, el Gobierno español hizo público su rechazo a la propuesta marroquí, mientras Rabat no autorizó una visita a Madrid del ministro de Relaciones con el Parlamento.