Sargentas

Y luego hay quien niega que las A mujeres suframos un sino fatal: ahora resulta que los del PDP nos quieren liberar por la expeditiva vía de meternos a todas en la mili. Ustedes ya saben quiénes son los del PDP: gentes abrasa das de celo familiar, para quienes la hembra es ante todo esposa y madre. Gloriosos destinos en lo universal, a los que ahora quieren añadir el de sargento.Explican los del PDP que el Ejército tiene que abrirse a las señoras, porque la situación actual va en contra de la Constitución. En esto tienen más razón que un santo, y nunca mejor dicha esta frase con la cantidad de patrones celestiales con que cuenta este partido. O sea, que la legalidad está de su parte. Lo que ya no tengo tan claro es que tal demanda sea un asunto feminista. Verán: a mí las batallas no me gustan ni siquiera como juego. Y el tener que hacer la mili me parece, ustedes me disculparán, una puñeta. La sociedad utópica de mis sueños es un territorio en el que no caben los ejércitos, Pongamos un ejemplo muy extrema do: si yo estoy, como es el caso, en contra de la pena de muerte, no voy a reivindicarla para las mujeres si sólo se aplica a los va rones. Y esto es lo mismo, sólo que menos truculento. -El feminismo no consiste en mimetizar al hombre, sino en la ambición de crear un mundo nuevo.

Ello es que los del PDP nos quieren redimir en filas prietas, a golpe de rancho peleón y de en torchados. Dicen que hay que copiar el modelo de integración más avanzado, que es el de Estados Unidos, en donde las mujeres pueden llegar, oh magnanimidad, a comandantes. Probable mente de Intendencia. Pero mientras suenan estos aires marciales, el país asiste a unos desfiles muy distintos: los de los abortistas detenidos, que andan marcando el paso hacia la cárcel. Y ese PDP que tanto se preocupa por nuestra liberación uniforma da está en primera línea del ata que, persiguiendo y atormentado a las mujeres y a los médicos. Curiosa manera esta de defender nuestros derechos. Que se que den con su chusco envenenado y -cuartelero.