_
_
_
_

Manila relaciona la muerte de Olalia con el secuestro del empresario japonés

Antonio Caño

ENVIADO ESPECIAL, Las autoridades filipinas creen relacionados los casos del asesinato del dirigente izquierdista Rolando Olalia y el del secuestro, el pasado sábado, de un empresario japonés en Manila, y consideran que ambos forman parte de un mismo plan para desestabilizar al Gobierno de Corazón Aquino. Medios financieros japoneses advierten, por su parte, del efecto negativo que el secuestro de su compatriota puede tener en el futuro de las inversiones japonesas en Filipinas, vitales para el desarrollo económico de este país.

El portavoz de la Presidencia de Filipinas, Joker Arroyo, uno de los hombres fuertes del Gobierno de Aquino, ha admitido la posibilidad de que los secuestradores del empresario japonés Noboyuki Wakaoji, manager general de la representación en Filipinas de la gigantesca compañía Mitsui, sean los mismos, o de la misma orientación o dirección, que los asesinos de Olalia.Otro alto funcionario de la Presidencia ha comentado que, "cualquiera que sea el que lo haya hecho, esto es una auténtica desgracia para el país".

El diario de Manila Business Day, habitualmente muy bien informado, citaba ayer a un ejecutivo japonés de la compañía Marubeni, quien afirmaba: "Estamos esperando con atención el desarrollo de la reciente visita a Japón de la presidenta Aquino, que ha sido un éxito, pero tengo mucho miedo de que esto (el secuestro) pueda afectar las futuras inversiones en Filipinas".

Tras la vuelta de Aquino

Wakaoji fue secuestrado el pasado sábado cuando regresaba a su casa en su Mercedes negro después de jugar un partido de golf'. El hecho ocurrió 24 horas después de que Aquino concluyese una visita de cuatro días a Japón en la que había obtenido más ayuda económica de la que nunca consiguió el Gobierno de Marcos.Según datos oficiales, la presidenta Aquino se trajo de Tokio ayuda y créditos blandos por valor de más de 900 millones de dólares (más de 120.000 millones de pesetas), con lo que Japón se convierte en el primer suministrador financiero de Filipinas. Aquino, al mismo tiempo, había abierto el camino para los inversores japoneses garantizando la estabilidad del Gobierno que ella preside.

Las empresas japonesas se habían interesado también por las posibilidades de explotación turística de Filipinas, y habían estudiado los medios de abrir los mercados japoneses a productos filipinos.

La Embajada de Japón en Filipinas no quiere todavía tomar una posición oficial sobre el tema y prefiere esperar a ver cómo finaliza el secuestro de Wakaoji. El suceso, sin embargo, ha obligado ya a que la comunidad japonesa en Manila tome medidas de seguridad suplementarias y ha creado un ambiente que los empresarios nipones consideran muy malo para los inversores.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_