Benegas afirma que el PSOE gobernará desde el diálogo

Txiki Benegas, candidato socialista a lendakari del Gobierno vasco, se mostró ayer completamente seguro de la victoria del PSOE en las próximas elecciones autonómicas y subrayó que su partido gobernará desde el diálogo, el entendimiento y el respeto, tendiendo puentes a todos los demócratas para lograr las mayores cotas de acuerdo y consenso.En el primer acto socialista en la capital de la comunidad autónoma, en un cine con el aforo medio cubierto, Benegas insistió en que su responsabilidad al dirigirse al auditorio era muy grande, ya que posteriormente tendría que responder de sus palabras desde el Gobierno vasco. "Tengo que medir mis palabras porque debo responder desde el Gobierno; la victoria está hecha, pero la queremos más clara", dijo.

Txiki Benegas, precedido en la palabra por el ministro de Obras Públicas, Javier Sáenz Cosculluela, llamó a todos los ciudadanos vascos a ser militantes de la paz y remarcó que no puede haber concesiones políticas con los que practican la violencia. El candidato se mostró convencido de que la Ertzantza y las fuerzas de Seguridad del Estado deben luchar juntas contra el terrorismo y, dentro del proyecto que el PSOE propone para recuperar el prestigio del pueblo vasco, afirmó que llamará desde Ajuria Enea a un gran pacto cultural.

En un tono mesurado, Benegas, que antes del mitin se había mostrado satisfecho por los resultados que a su partido le dan las encuestas, apostó por una mayoría clara y estable que permita tender desde el Ejecutivo puentes a todos los partidos, excepto a los que defienden la violencia. El candidato insistió en que el marco desde el que se moverán los socialistas en Ajuria Enea está definido por la Constitución v el estatuto de autonomía; afirmó que emprenderá medidas urgentes para que Euskadi deje de ser una región en declive económico e indicó que debe reducirse la conflictivid.ad y aumentar la productividad.

Benegas concluyó su discurso indicando que el Gobierno socialista en Euskadi supondrá un punto y aparte en lo vivido hasta ahora por los vascos bajo el liderazgo nacionalista.