Maravall dice que el bachillerato se adecuará al mercado de trabajo

El Ministerio de Educación se propone, entre los objetivos de la política educativa, conseguir un bachillerato más adaptado a las expectativas profesionales de los alumnos y que se rija por una estricta igualdad de oportunidades. Así lo señalo ayer ante la correspondiente comisión del Congreso el titular del departamento, José María Maravall. El ministro señaló que Educación enviará al Parlamento, en 1988, la ley de Ordenación del Sistema Educativo, que afectará a la educación preescolar, EGB y enseñanzas medias.

Esta ley, junto con el desarrollo de la LODE, serán los principios básicos de actuación de la política del ministerio en los próximos cuatro años. Maravall compareció en el Congreso para explicar la política educativa no universitaria y señaló que la ordenación del sistema educativo tiene también como principales finalidades alcanzar una enseñanza preescolar más extensiva y lograr una educación de base, universal hasta los 16 años, y no discriminatoria.

El ministro hizo un resumen de lo realizado por el Gobierno en los últimos cuatro años y de los principales objetivos de su departamento para esta legislatura: constitucionalizar íntegramente el sistema educativo; mejorar el servicio público de la educación, incrementando sus recursos y su capacidad para extender el derecho a la educación; promover condiciones de igualdad en el ejercicio de los derechos y libertades asociados con la educación y fomentar la igualdad de oportunidades; mejorar el rendimiento de los recursos educativos, y efectuar una ordenación del sistema educativo.

El ministro indicó que parte de estos objetivos se han cumplido con la aprobación de la LODE, y la aplicación de esta ley "va a constituir una de las principales líneas de actuación del Ministerio".

Conciertos

En cuanto a las actuaciones de carácter no normativo, Maravall citó la puesta en marcha del régimen de conciertos, la celebración de elecciones para consejos escolares y la constitución de los nuevos órganos de gobierno en los centros públicos y concertados. Los conciertos, según Maravall, han afectado a 3.553 centros de EGB y 734 centros de Formación Profesional de primer grado.Maravall afirmó que la mejora del servicio público de la educación debe basarse en la asignación de medios suficientes y agregó que si se consideran conjuntamente los presupuestos del Ministerio de Educación y de las Consejerías de Educación de los Gobiernos autonómos con competencias en la materia, han pasado en los últimos cuatro años de 535.087 millones de pesetas a 965.548 millones.

Todos los portavoces de los grupos parlamentarios de la oposición coincidieron en calificar la intervención de Maravall como "una declaración de buenas intenciones", en la que no definió, opinan, los criterios de actuación de su departamento.