Un conflicto escolar enfrenta a tres pueblos de la sierra madrileña

Un grupo de unos 50 niños de los los de Pedrezuela y El Vellón y de un núcleo anexo administrativamente a este último, El Espartal, no pudieron entrar ayer al colegio comarcal de El Molar por la negativa del Ayuntamiento y vecinos de la localidad, enfrentados con las otras dos por el reparto de los gastos de mantenimiento del colegio. Los ánimos de los vecinos están muy exaltados por este conflicto, que otros observadores más lejanos no dudan en calificar de cúmulo de cabezonerías.

Las posturas están no sólo enfrentadas, sino cerradas por completo a los argumentos de la .otra parte, y cada sector acusa al otro de intransigencia. El colegio de El Molar, población de 2.300 habitantes situada 40 kilómetros al norte de Madrid, alberga a algo más de 500 niños, de los que unos 50 o 60 provienen de los cercanos municipios de Pedrezuela y El Vellón y de un núcleo habitado anexo a este último, El Espartal. Aunque el colegio no tiene la calificación de comarcal, requisito imprescindible para recibir las subvenciones correspondientes, éstas no han faltado en los últimos 10 años, primero entregadas por la Diputación Provincial y luego por la Dirección General de Educación de la Comunidad de Madrid.El curso pasado la Comunidad sólo remitió una parte de la subvención, en base a que el porcentaje de niños foráneos que asistían al colegio es tan escaso que se duda de que el mismo pueda ser calificado de comarcal.

Este año, la subvención no ha llegado todavía, y el Ayuntamiento de El Molar pidió a los de Pedrezuela y El Vellón que aportaran fondos para el mantenimiento del colegio, facturas de luz y calefacción, limpieza y salario del conserje. Pedrezuela debería aportar unas 150.000 pesetas anuales, y El Vellón-El Espartal, unas 200.000 pesetas.

Negativa al pago

Ambos ayuntamientos se han negado al pago, aduciendo que, en una reciente reunión celebrada en Madrid, en la que participaron representantes de los tres ayuntamientos, la directora general de Educación de la Comunidad, Aurora Ruiz, y el subdirector provincial del Ministerio de Educación, se acordó que el colegio sería declarado oficialmente comarcal en un plazo lo más breve posible, e inmediatamente la comunidad libraría la subvención, lo que fue confirmado ayer por Aurora Ruiz.Los vecinos y el Ayuntamiento de El Molar no se fian, y quieren que, hasta que llegue la subvención, los otros dos municipios aporten fondos, aunque después se les devuelva. Las posturas, irreconciliables, desembocaron en una tensa asamblea de vecinos celebrada el lunes, a la que asistieron personas de las tres localidades y en la que se cruzaron insultos y acusaciones mutuas.

Ayer, los niños de Pedrezuela, El Espartal y El Vellón no pudieron entrar a clase por la oposición de un grupo de mujeres de El Molar. Los niños estuvieron toda la mañana frente a la puerta del centro escolar. Como decía la madre de uno de ellos, "la pena es que los que realmente están pagando el pato son los niños".