La policía precinta la mayoría de cintas vídeo descubierta en España

La policía ha precintado en Perales de Tajuña (Madrid) la mayor fábrica fraudulenta de cintas de vídeo descubierta en España. Se han intervenido 5.290 cintas grabadas, 1.673 vírgenes y 5.445 sellos de control del Ministerio de Cultura. La producción, de salir al mercado, habría tenido un valor de 4.000 millones de pesetas, según la Federación de Asociaciones Antipiratería, que preside el ex director de la Seguridad del Estado Francisco Laína. José Luis Tortuero, de 43 años, técnico electrónico, ha sido detenido como responsable del del fraude. Siguen las investigaciones sobre otros implicados.

Funcionarios de policía del Grupo de Delitos Económicos de la Brigada de Policía Judicial de Madrid investigaban desde hace varios meses la distribución ilegal de películas en vídeoclubes de todo el territorio nacional, por infracción de la normativa vigente en materia de derechos de autor y propiedad industrial.Las características de la falsificación hacían evidente que se trataba de una organización dotada de los mejores medios técnicos de reproducción de películas y confección de estuches, carátulas, etiquetas y sellos polaroid, comercializados éstos bajo control del Ministerio de Cultura.

La falsificación de estos sellos o su reventa por parte de quienes están autorizados a comprarlos "ha tirado por tierra una importante medida adoptada hace dos años contra esta piratería", dijo ayer José Manuel Turné, secretario de la Federación de Asociaciones Antipiratería (FAP), integrada por distribuidores de cine y vídeo. El material incautado en este caso fue llevado ayer por la tarde a un almacén de esta federación, en la calle de Blanca de Navarra, número 7, de Madrid, por orden judicial y en calidad de depósito. "El Ministerio de Cultura está haciendo una inhibición de funciones porque no controla esa reventa", añadió Turné.

Sellos de Cultura

Turné explicó que tales sellos los vende el Ministerio de Cultura a los distribudores de pelí culas de vídeo -unos 200 en España- para legalizar las pe lículas en el mercado. "Cuestan 30 pesetas y se pueden comprar todos los que se quieran para cada película. Cada sello lleva un número, adjudicado a una película determinada. Pero hay distribuidores que los venden a 600 pesetas. No se controla esta reventa, pese a que Cultura sabe a quién vendió los sellos que aparecen luego en películas falsificadas. La verdad es que esos distribuidores se escudan luego en que ellos vendieron los derechos a otra empresa de distribución y, cuando vas a buscar esa empresa, ya ha desaparecido".En esta última incautación policial se han intervenido 5.445 sellos polaroid, parte de ellos auténticos y parte falsificados. La falsificación se realizó por el procedimiento de borrar dicho número y grabar otro encima.

La policía averiguó que esta red fraudelenta podía ser obra de José Luis Tortuero Sanz, natural de Madrid, de 43 años de edad, conocido por los apodos de Dientes y El Pombi, técnico en electrónica y muy relacionado en este ramo comercial, el cual, meses atrás, había adquirido un chalé en la urbanización Valdeperales, en Perales de Tajuña, por valor de 20 millones de pesetas.

El pasado finde semana, la policía efectuó un registro en este chalé y descubrió la infraestructura de falsificación.

El propietario, José Luis Tortuero, fue detenido y puesto a disposición de la autoridad judicial de Aranjuez (Madrid). Tortuero se negó a prestar declaración y, una vez en el depósito municipal de esta ciudad, escapó de los calabozos, pero fue detenido de nuevo a los pocos minutos por dos agentes de la Policía Municipal.

Andalucía y Cataluña

Todas las habitaciones del chalé, e incluso el pasillo, según informó ayer la policía, estaban destinadas a la produción de películas piratas, almacén y centro de distribución de las mismas. El secretario de FAP señaló ayer que esta organización "tiene ramificaciones en Andalucía y Cataluña".Sobre este aspecto, fuentes oficiales de la policía indicaron que continúan las investigaciones para determinar la responsabilidad de otras personas implicadas en esta red de falsificación y fraude. El resto del material incautado es el siguiente: 56 magnetoscopios, cuatro televisores, tres aparatos de grabación y reproducción U-Matic, otros tantos monitores, dos cámaras de video, un rebobinador, un mezclador y un proyector de 35 milímetros, 237 carátulas, 259.996 etiquetas, 1.673 películas vírgenes, 5.290 cintas grabadas, 66 fotolitos, 502 masters y 2.163 estuches con logotipo falsificado. En el momento del registro se grababa la película El jinete pálido, último lanzamiento de Warner-Home-Vídeo.

La presunta falsificación de películas se realizaba por dos procedimientos, según la información policial: a partir de casetes originales y de películas de estreno cinematográfico que aún no habían sido comercializadas en vídeo. Para esta operación se utilizaba el citado proyector y una de las cámaras U-Matic para conseguir el master.