El niño al que se trasplantó un hígado se recupera con normalidad
Las constantes vitales de Adolfo López García, el niño de 17 meses al que se trasplantó un hígado en la noche del sábado al domingo pasados en la Residencia Sanitaria La Paz, de Madrid, son estables, dentro de la gravedad lógica. Adolfo López, que llevaba siete meses esperando una donación idónea para él, tuvo que ser intervenido de nuevo a las pocas horas de sufrir el trasplante para suturarle un vaso sanguíneo.Hasta ahora son muy pocos los niños con trasplante de hígado a tan temprana edad, por lo que no es posible conocer con certeza las dificultades que presentará Adolfo López en su recuperación. Las probabilidades de éxito son más altas en los niños que en los adultos. Actualmente, la persona que más ha vivido con un hígado ajeno es una norteamerica de 24 años que recibió su nuevo órgano a los seis.
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