140 reclutas de la Guardia Real, entre los afectados por la intoxicación de Burgos
Aproximadamente 140 reclutas aspirantes al ingreso en el Regimiento de la Guardia Real, que cumplían un período de instrucción en el aeródrorno de Burgos, resultaron intoxicados en la comida del martes y se encuentran hospitalizados en el Hospital Militar de dicha ciudad. La comida ocasionó también la intoxicación de unos 100 jóvenes de uno y otro sexo -en su gran mayoría, hijos de militares- que se encontraban realizando cursillos de vuelo sin motor y que tuvieron que ser trasladados a Madrid y hospitalizados en el Hospital del Aire.Fuentes del hospital Militar de Burgos afirmaron que todos los aspirantes han respondido bien a la medicación y se encuentran fuera de peligro. Asimismo, la evolución de los hospitalizados en Madrid, entre los que hay tres esposas de capitanes del Ejército del Aire, tres tenientes y un comandante, evolucionan bien y al menos 15 habían sido dados de alta el sábado.
Una mujer, madre de uno de los aspirantes hospitalizados en Burgos, declaró ayer a este periódico: "Los chicos ya se encuentran mucho mejor, pero ingresaron en estado bastante grave. Mi hijo, como todos los demás, sufría vómitos, diarrea, fuertes dolores de abdomen y deshidratación. La intoxicación afectó a 140 de los 150 aspirantes y jefes que componían la escuadrilla Plus Ultra. A los que ingresaron el miércoles, les han estado dando suero hasta el viernes". La mujer añadió que nadie les informó de lo sucedido. "Nos enteramos porque oímos la noticia por la radio el miércoles", dijo, y pidió que se exijan responsabilidades.
Fuentes del hospital Militar de Burgos afirmaron que los aspirantes se encuentran mejor y ya han comenzado a ingerir alimentos ligeros. "Ha sido una intoxicación molesta, como toda enfermedad, pero no peligrosa. Un buen número de ellos serán trasladados él lunes (por hoy) a Madrid para observar su recuperación". Parece ser que la mahonesa ingerida en uno de los platos de la comida fue la causa de la intoxicación.
Por otra parte, parece confirmarse que la manipulación de los alimentos por una cocinera enferma originó la intoxicación sufrida la semana pasada por 84 niños albergados en un campamento juvenil en Cercedilla. Se ha detectado presencia de salmonella sólo en los platos cocinados.
