Los nacionalistas catalanes atribuyen el fallo al "control del PSOE" sobre el alto tribunal

La reacción de los partidos nacionalistas catalanes al conocer que el Tribunal Constitucional ha estimado los recursos presentados por el Gobierno contra dos artículos de la ley de Normalización Lingüística de Cataluña ha sido atribuir esa sentencia a un supuesto control que el partido socialista tiene, en su opinión, sobre el alto tribunal. Los socialistas catalanes restan importancia a la aceptación del recurso, recordando que afecta sólo a dos cuestiones formales, una de ellas introducida a petición suya, que no impiden la aplicación de la ley.

Jaume Camps, secretario del grupo de Convergència i Unió (CiU) en el Parlamento catalán, cree que la aceptación del recurso por el Tribunal Constitucional "es la primera consecuencia de la nueva mayoría socialista y de la actuación coherente con ella de la tercera cámara, en la que el PSOE tiene la mayoría".En parecidos términos se expresó Ferran Camps, de Unió Democrática. "El Tribunal Constitucional está controlado por los socialistas", dijo, "y a partir de ahí no puede haber sorpresas. La responsabilidades de los socialistas, que votaron a favor de la ley en el Parlamento catalán y luego la impugnaron, con sus ministros catalanes. Todo esto tiene una lógica muy preocupante".

Antoni Subirá, portavoz del grupo de Convergència, restó importancia a la supresión del apartado 2 del artículo 42. Alegó que su contenido no entraba en los planteamientos de su partido, pero que lo aceptaron por la insistencia de los socialistas en incluirlo. "La verdad es que nos hace una cierta gracia que sea su Gobierno el que lo haya impugnado", dijo. En cambio, reaccionó con virulencia contra el otro punto, la supresión del párrafo 1 del artículo 62, que establecía la primacía de la versión en catalán de la ley en caso de dudas de interpretación. "Lo normal es que la original sea la versión auténtica. Lo alarmante es comprobar cómo se desconoce el hecho de que la dengua utilizada por los autores de la ley fue el catalán", sentenció.

El portavoz de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), Víctor Torres, calificó de "absolutamente lamentable" el fallo, y aseguró que contribuye a reafirmar el criterio de su partido sobre el mal estado de las relaciones entre el Gobierno central y el de la Generalitat. "Nosotros hicimos en el Parlament un serio esfuerzo para consensuar esta ley, porque afecta a una cuestión conflictiva", dijo Torres, "y no podemos admitir lo que, en la práctica, es un no reconocimiento del idioma catalán y una agresión al derecho de Cataluña a la cooficialidad de su lengua".

Reacción del PSC

Lluís Armet, responsable de política institucional de los socialistas catalanes y portavoz de su grupo en el Parlament, subrayó que las puntos de la ley impugnados "no afectan a sus aspectos esenciales y no impiden la plena aplicación de la ley ni la desvirtúan".El portavoz socialista afirmó que cuando el Gobierno presentó el recurso, hace ya tres años, "CiU quiso presentar esta decisión del Gobierno como un choque frontal contra la Generalitat. Ahora, pasado el tiempo, todo el mundo puede comprobar la escasa importancia del asunto". Añadió que al final ha quedado claro que CiU "intentó obtener un provecho partidista de la presentación del recurso".

El diputado comunista Rafael Ribó señaló que sin conocer el texto de la sentencia "es difícil conocer el alcance de la decisión adoptada sobre la validez del texto en catalán como auténtico en caso de duda. Si la sentencia dice que el auténtico es el castellano, sería grave, porque expresaría un recelo injustificable".