La Comunidad destina millones para la prevención de incendios veraniegos

Cerca de 300 incendios forestales se han registrado en la Comunidad de Madrid en los cinco primeros meses del año. El consejero de Agricultura anunció que, de cara al verano, su departamento ha destinado 20,3 millones de pesetas para la prevención y extinción de incendios, y se ha declarado época de peligro del 15 de junio al 16 de octubre. El pasado año hubo 1.888 incendios.De los 300 incendios en este año, 17 se produjeron en zonas de monte alto y afectaron a 32 hectáreas; en monte bajo hubo 48, que afectaron a 176 hectáreas; el resto fue en zonas agrícolas, con un total de 200 hectáreas devastadas. El pasado año hubo 78 incendios en monte alto, 210 en bajo y 1.500 en zonas agrícolas; unas 16.300 hectáreas resultaron dañadas.

El consejero de Agricultura, Luis Maestre, manifestó ayer, durante una conferencia de prensa, que, pese al número de incendios, éstos no afectaron a zonas de alto valor ecológico, sino a zonas de recientes replantaciones. La Comunidad ha iniciado una campaña el lema Respete las reglas del fuego, en el que establece una serie de medidas preventivas y recuerda la prohibición de encender fuegos y las limitaciones, autorizaciones necesarias en los 107 municipios que poseen en sus respectivos términos una riqueza forestal.

El plan señala una serie de prohibiciones y limitaciones en el uso del fuego o de materiales inflamables en todos los terrenos forestales, tanto si están poblados con especies arbóreas como por matorral o pastizal, y además, en la franja de 400 metros que los circunda.

Cien millones de pesetas se han destinado a la contratación de personal para la atención de las torretas de vigilancia forestal. Esta vigilancia se ha extendido a la noche. Asimismo, se ha abierto un concurso para adquirir nueve vehículos autobomba por un importe de 150 millones. La Consejería de Agricultura tiene prevista la difusión de anuncios en Prensa, radio y televisión; también ha editado un folleto para los ciudadanos en el que se recomienda, en caso de incendio, que nunca se huya en la dirección del viento, que no se intentar cruzar las llamas ni situarse en la zona ya quemada.

El consejero de Gobernación, Virgilio Cano, manifestó que el 90% de los incendios de 1985 se produjeron por la negligencia o el descuido de las personas que visitan los montes. La misma consejería ha elaborado el plan de Alerta Roja para paliar los déficits de abastecimiento de agua de los pueblos durante la época estival. El pasado año 34 pueblos necesitaron el auxilio de camiones-cisterna.