Un juez declara que la bandera cuatribarrada vulnera en Valencia la legalidad vigente
Josep Guia, ex vicerrector de la universidad de Valencia y dirigente del independentista Partit Socialista d'Alliberament Nacional dels Països Catalans (PSAN), ha sido condenado a dos días de arresto por una falta de lesiones. Según la sentencia dictada por Gustavo Solaz Lita, titular del Juzgado número 7 de Instrucción de Valencia, Guia y otros cinco militantes del PSAN, condenados a igual pena, agredieron a un grupo anticatalanista que corregía con pintura azul las banderas cuatribarradas de unos carteles pegados en la vía pública. Para el juez, la cuatribarrada (en Valencia) es "una bandera extraña" y "vulnera la legalidad vigente".
El juez disculpa implícitamente la actitud de los pintores al señalar que "colocar un color corrector a unas banderas extrañas" no es un acto de agresión y afirma que sí sería reprochable interferir la colocación de los carteles. Según la sentencia, los agresores "se delataron como colaboradores de unas banderas que vulneraban la legalidad vigente en materia de símbolos autonómicos".El juez cita para ello el Estatuto de Autonomía de la Comunidad Valenciana, que consagró como bandera oficial, tras una larga polémica entre los partidarios de una y otra bandera, la senyera cuatribarrada con una franja azul junto al mástil, hasta entonces representativa de la ciudad de Valencia. La bandera cuatribarrada ha seguido siendo reivindicada y utilizada por partidos y sindicatos de izquierda e incluída en su publicidad electoral. Fue usada por el partido socialista y colocada en innumerables centros oficiales hasta la aprobación del Estatuto, en 1982.
El juez sostiene que "en todo estado de derecho, los ciudadanos tienen el inexcusable deber de ser respetuosos con su normativa legal y acatarla... y es obvio que el Estatuto de Autonomía de la Comunidad Valenciana proclama como su símbolo la Señera".
Josep Guia insistió ayer en que no participó en los hechos, tal y como lo reconoció meses después Carles Recio, uno de los agredidos venido hacia posiciones menos anticatalanistas. Guia fue identificado por sus querellantes no en un primer momento, sino en su segunda declaración ante la policía, lo que probaría, según Guia, que existía una maniobra de desprestigio auspiciada por Unión Valenciana, partido al que pertenecían los querellantes. La sentencia no es recurrible pero los condenados estudian un recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional.
