EI historiador Antonio Domínguez Ortiz se siente en deuda con el país por la obtención del Premio Menéndez Pidal

El historiador sevillano Antonio Domínguez Ortiz, de 77 años, que, según se supo el miércoles, ha obtenido el Premio Menéndez Pidal de investigación histórica, instituido por el Ministerio de Educación y dotado con 10 millones de pesetas, dijo, al conocer el galardón, sentirse obligado con el organismo que lo concede y con todo el país, "pues el dinero con que está dotado sale de todos los españoles".

Esta es la primera vez que se falla este premio, que algunos equiparan, por su importancia, al Cervantes de literatura. Domínguez Ortiz es una de las máximas autoridades contemporáneas en la historia de Andalucía. Una de las premisas que sustentan su amplia obra es la imposibilidad de escribir la historia de España si antes no se ha estudiado fragmentariamente por zonas y regiones.En un tono de buen humor, Domínguez Ortiz reconoció que el premio supone una cantidad importante, "pese a la inflación". "El premio, para mí, tiene dos vertientes: una es la coronación de una larga labor de investigación, y la otra es un estímulo para continuar trabajando". La propuesta de Antonio Domínguez Ortiz para el premio fue presentada por el rector de la universidad de Granada, José Vida Soria, quien también ha solicitado del Ministerio de Educación su nombramiento como profesor emérito de la facultad de Filosofía y Letras.

Domínguez Ortiz reside en Granada. Ayer elogió a Menéndez Pidal, con quien tuvo un contacto remoto al concluir sus estudios universitarios, y reconoció haberse alimentado de sus obras, "que están vivas a pesar del tiempo transcurrido, aunque habría que someterlas a leves modificaciones". "Menéndez Pidal es un hito señero y me satisface que este premio lleve su nombre", dijo.

Sobre su probable nombramiento como profesor emérito de la universidad granadina, recordó que la tramitación del expediente ha sido muy larga y que ignora si existe algún obstáculo administrativo que impida su resolución. "Sería para mí una gran satisfacción dictar lecciones o participar en algún cursillo en la universidad, si es que no me lleva mucho tiempo, pues estoy muy ocupado". Afirma que no echa de menos sus clases en los institutos de enseñanza media, puesto que el contacto lectivo no lo ha perdido del todo gracias a su participación en tribunales para juzgar tesis universitarias de índole histórica.

El historiador andaluz se siente abrumado por su tarea de investigador. "Trabajo en mil cosas, en artículos, ponencias y prólogos, sobre todo prólogos, me piden muchísimos", comenta sonriente. En la actualidad trabaja en la nueva redacción de la Historia de España de la editorial Alfaguara, y ayer marchó a Madrid para participar en un congreso itinerante de historia que se trasladará,a otras ciudades, como Palma de Mallorca.

La identidad andaluza

Domínguez Ortiz nació en Sevilla en 1909 y ha colaborado con distintas universidades. Como catedrático de instituto de enseñanza media ha recorrido las provincias de Cádiz, Madrid, Sevilla y Granada, y es doctor honoris causa por la universidad de esta última ciudad. Su contribución a la historia andaluza es muy extensa y está dedicada en gran parte al esclarecimiento del pasado de la región. El rigor y la erudición documental son algunas de las características de sus obras. Ya en sus primeros escritos puso de manifiesto su pasión por la historia andaluza. Su discurso de investidura como doctor honoris causa por Granada versó sobre la identidad de Andalucía. El Gobierno autónomo lo nombró hijo predilecto.En su producción hay un gran interés por los aspectos poblacionales y socioeconómicos y por el estudio de los grupos sociales marginados a través del decurso histórico de España, como los moriscos, judeoconversos y esclavos. Este aspecto apenas aparece en el resto de la historiografia nacional, aparte de la monumental obra de Menéndez Pelayo Historia de los heterodoxos españoles y en algunos estudios de Julio Caro Baroja.

Sin embargo, la preocupación de Domínguez Ortiz por el pasado no le ha hecho perder el nexo con el presente, sino que más bien ha revisado la actualidad a través de sus antecedentes. Su vocación docente, como él mismo ha confesado, ha sido similar a su interés por la investigación.

Ha dirigido la Historia de Andalucía editada por Planeta, y entre su amplísima bibliografía destacan La sociedad española en el siglo XVII, Política y Hacienda de Felipe IV y Sociedad y Estado en el siglo XVIII español, dentro de su contribución a la historia española.

Sobre Andalucía ha escrito libros como Andalucía en el siglo XVII, Orto y ocaso de Sevilla, Las alteraciones andaluzas y su reciente Andalucía ayer y hoy.