Sobre el cáncer
Alrededor del mundo (y EL PAÍS no es excepción) se utiliza la palabra cáncer para designar a un complejo de enfermedades caracterizadas por la proliferación maligna de tejidos celulares.-Aunque profano, me atrevo a someter a usted por intermedio de órgano de prensa tan prestigioso, una opinión personal favorable el empleo de terminología más discriminatoria; a la vez, por motivos de exactitud y, sobre todo, para ayudar a que la opínión pública vaya descargándose del fatalismo que aún hoy predomina al abordar el tema.
Todavía en nuestra época subsiste el prejuicio medieval que asociaba la palabra lepra con la pérdida de toda esperanza, y a ello se ha sumado el terror que inspira el diagnóstico de cáncer.
A mi entender, ya sería hora de que los facultativos, con asistencia de los periódicos y demás medios de difusión, empezaran a especificar de qué cáncer se trata, pues las variedades de tumores malignos exigen que de una vez por todas se diferencie al respecto. Entre un epitelioma de pronóstico tranquilizante y un carcinoma hepático sin remisión, por ejemplo, media una gran cantidad de categorías neoplásicas más o menos curables o tratables, que posiblemente deberían ser distinguidas y denominadas como otras tantas enfermedades diferentes.
Ojalá que así se haga, y que en esta forma se ayude a las personas afectadas actualmente por algún tumor maligno como a las que puedan estarlo en el futuro.-
