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El Gobierno vasco estima que ha mejorado el clima social frente a la violencia

El Gobierno vasco estima que, en el último año y medio, el clima social frente a la violencia ha mejorado sustancialmente, tal y como demuestra el estrecho diálogo entre Madrid y Vitoria, sus contactos entre los partidos políticos y las conversaciones entre el PNV y Herri Batasuna. El Ejecutivo autónomo, por medio de su portavoz, no quiso dar falsas expectativas sobre la resolución del problema, "que puede durar años", y restó importancia a la detención de Domingo Iturbe Abasolo, supuesto máximo dirigente etarra.

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Eugenio Ibarzábal, portavoz del Ejecutivo, insistió en que el Gobierno vasco no actuará en el tema de la víolencia al margen del Parlamento vasco y de la voluntad mayoritaria del pueblo e indicó que lo más importante no era quién dirigiera el proceso de conversaciones entre las partes, sino que se resolviera el problema. Ibarzábal calificó la cuestión de la violencia como un complejo rompecabezas que había que recomponer y descartó la posibilidad de que existan negociaciones paralelas que no hayan salido a la luz pública. "No existen más negociaciones de las que hay".El portavoz no quiso pronunciarse sobre si el actual proceso de negociación entre fuerzas políticas que se desarrolla en Euskadi contaba con el beneplácito de Madrid, aunque reconoció que las relaciones entre los Gobiernos vasco y central sobre el tema son estrechas, y agregó que en Vitoria se conocía la atmósfera en la que el Gobierno central abordaba el problema.

El portavoz del Ejecutivo comentó, con ironía, el hecho de que, mientras el plan de concienciación contra la violencia del Gobierno vasco había sido atacado por partidos políticos por carecer de líneas maestras, la propia organización ETA Militar, en un comunicado a raíz del atentado de Madrid, reconocía cierta importancia a tal plan.

Ibarzábal rechazó taxativamente las condiciones impuestas por ETA para iniciar el diálogo y recordó que el Gobierno vasco mantendrá la firmeza que ha llevado hasta el momento.

No olvidó en su declaración el portavoz las manifestaciones hechas por Iñaki Aldekoa, dirigente de HB, al hilo de la reunión entre HB y el PNV, en las que se afirmaba que el Gobierno vasco era un convidado de piedra en esta negociación sobre la violencia. "Si Aldekoa, que hasta el año 1977 era anti-ETA, carece de relevancia y credibilidad en la propia HB, ¿Cómo las va a tener para otros?". Por otra parte, el portavoz indicó que ya era hora de que los líderes de HB tuvieran la relevancia y la importancia "que hasta el día de hoy no han tenido".

Posición inmejorable

Ibarzábal prefirió no considerar al Gobierno vasco como el pivote central en torno al cual se están desarrollando todos los procesos de conversación y negociación para tratar de hallar una salida a la violencia, aunque indicó que el Gabinete vasco, presidido por José Antonio Ardanza, está en una posición inmejorable para conectar con las diferentes partes. En relación a la detención de Domingo Iturbe Abasolo, Txomin, Ibarzábal indicó que, a juicio del Gobierno, se estaba dando al suceso más relevancia de la que realmente podía tener. El portavoz afirmó que la detención había supuesto un evidente cambio de actitud del Gobierno francés.El Gobierno vasco denunció ayer la actitud vandálica de trabajadores de la empresa Magefesa que quemaron en Bilbao un tren dependiente de la administración autonómica, y causó daflos valorados entre 250 y 300 millones de pesetas.

Más información en la página 47

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