La CE no garantizó ayer la neutralidad de España en los presupuestos comunitarios del ejercicio 1987

La mayoría de los países de la Comunidad Europea (CE) rechazó ayer el comprometerse formalmente a garantizar a España una neutralidad financiera frente al presupuesto de la Comunidad para 1987. No obstante, los ministros de Economía y Finanzas de los doce, reunidos ayer en Luxemburgo, reconocieron, al fijar el marco de gastos de la CE para 1987, que tanto el peso de los compromisos de¡ pasado como las consecuencias de la ampliación a España y Portugal representan un "problema" que se debatirá en el "contexto del procedimiento presupuestario".

Al discutir el marco de los gastos de la Comunidad para 1987, el ministro de Economía y Hacienda, Carlos Solchaga, solicitó en Luxemburgo de sus homólogos de los doce una declaración común para garantizar que España no será en 1987 contribuyente neto a las arcas de Bruselas. La declaración venía arropada en un lenguaje técnico sobre el aumento de los fondos, estructurales. La mayoría, con la República Federal de Alemania (RFA) a la cabeza, se opuso a la demanda española, que tuvo que conformarse con una declaración unilateral. España lo aceptó a cambio de la mención antes señalada."Si no hubiéramos introducido el texto, hubiera sido imposible reconsiderar el problema" posteriormente, declaró Solchaga, para el cual, "el equilibrio presupuestario latía en el fondo de la propuesta". España estaba preocupada con un aumento insuficiente de los fondos estructurales, que le hubieran llevado a una situación de déficit en 1986 frente al presupuesto de la CE.

El marco de referencia de los gastos de la CE para 1987, aprobado ayer en Luxemburgo, totaliza unos gastos comunitarios de 35.304 millones de ECU (unidad de cuenta europea, unos 4,8 billones de pesetas), de los cuales un 65% es para los gastos derivados de la garantía de precios agrícolas, y 7.950 millones de ECU ("dudo que sea suficiente", dijo Solchaga) en concepto de fondos estructurales. Aún así, la CE necesitaría 1.097 millones adicionales de ECU en 1987 para hacer frente a sus obligaciones. Tendrá, pues, que recortarlas. El marco de referencia no es un presupuesto, sino sólo las grandes líneas de sus principales partidas.

Déficit crónico

El panorama es sombrío. La CE carecerá este año de 500 millones de ECU (68.000 millones de pesetas) para hacer frente a sus obligaciones. En 1987, la carencia será de más del doble: 1.097 millones de ECU, según datos facilitados ayer por la Comisión Europea a los ministros de Economía y Finanzas. Dado que no hay unanimidad -hay mayoría en contra- entre los doce para ampliar los recursos propios de la CE hasta 1988, los gastos habrán de ser recortados. Y los fondos estructurales (regional, social y de infraestructuras agrícolas) y las nuevas políticas de la Comunidad. Con lo que la situación española frente al presupuesto de la Comunidad está comprometida.

"Espero que el sistema sea suficientemente flexible como para garantizar el equilibrio en 1986 y que no aprobemos unos presupuestos que, por reducir mucho los fondos estructurales en 1987, casi con toda seguridad ese equilibrio el año que viene", dijo Solchaga.

Dólar e inflación

Las dos tendencias que tanto alegran a los Gobiernos europeos -la caída del dólar y la reducción de la tasa de inflación- vienen a empeorar la situación presupuestaria de la CE. Un 10% de reducción del valor del dólar respecto al ECU conlleva gastos suplementarios para la CE de 1.000 millones de ECU, en razón de las más altas subvenciones que tiene la CE que otorgar a sus exportaciones agrícolas (con un precio interior superior al mundial).

La caída de la inflación supone menos ingresos en concepto de impuesto sobre valor añadido (IVA) para la CE.

Así las cosas, los ministros debatieron la situación presupuestaria. de la CE en 1986, y el marco de los gastos para 1987. Para 1986 falta ya dinero. La Comisión propondrá el miércoles un presupuesto complementario de 2.500 millones de ECU. Pero incluso así, según la Comisión, la CE, dentro de sus recursos actuales de 1,4% de la base imponible del IVA, carecerá de 500 millones de ECU.