_
_
_
_
CONFLICTO BÉLICO EN EL MEDITERRÁNEO

Un hombre fuera del sistema

El coronel libio Muammar el Gaddafi, de 43 años, es la verdadera encarnación del político excéntrico. No porque diga o deje de decir, porque su comportamiento público se nutra de exhibicionismo, fantasía, petróleo y ropa italiana, sino porque su voluntad de no entrar en el juego de la política convencional le ha apartado del centro, convirtiéndole en alguien que está fuera del sistema. A ello no sólo ha contribuido Gaddafi, sino también los que han reforzado su carácter de paria del juego político internacional. Los Estados Unidos de Reagan han redondeado el personaje nombrándole enemigo público número uno, pero también una mayoría de los propios Estados árabes ha obrado tendiendo un cordón sanitario a su alrededor como mejor manera de acorralar sus instintos.Desde su aparición en el horizonte político árabe, cuando tomó el poder al frente de un grupo de oficiales el 1 de septiembre de 1969, Gaddafi ha sido un hombre inflamado por una gran pasión: la unificación política del mundo árabe. Hasta la muerte de Nasser, en 1970, no aspiraba a ser más que el mejor seguidor del rais y únicamente el alejamiento del sucesor de Nasser, Anuar el Sadat, de la lucha contra Israel pudo lanzarle a la búsqueda de un destino personal.

Más información
Libia exhorta al Mundo árabe a "destruir Estados Unidos"

La tragedia del coronel ha sido desde entonces la de un líder asentado en una formidable riqueza petrolífera que, sin embargo, carece de un país desarrollado y demográficamente fuerte sobre el que extender su influencia. Con todo, su carácter de político alejado del centro, más que descentrado, le da una fuerza siempre imprevisible. Es probablemente el único estadista del mundo que se halla en la posición tan peligrosa como envidiable de poder decir casi todo lo que piensa. Y lo que dice Gaddafi lo piensan muchos en todo el mundo árabe y también más de uno de sus prudentes estadistas, afectos a un juego muy diferente en el segmento del círculo que les corresponde dentro del sistema.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_