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Tribuna:CRECIMIENTO DE UN SERVICIO PÚBLICO
Tribuna
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Un 'metro' moderno para Madrid

El crecimiento del metro, lento pero constante, ha experimentado, como recoge el autor de este artículo, una aceleración desde 1978, con la intervención de la compañía por el Estado, y ha pasado de 65 a 108 kilómetros de red.

El metro de Madrid es ahora un poco más grande. La apertura al público de un nuevo tramo de la red acerca aún más este medio de transporte al ciudadano, ampliando de paso la oferta de servicio que se estaba ofreciendo. Un crecimiento, en cualquier caso, que, si bien fue lento, aunque constante, desde que fuera inaugurada la primera línea (Sol-Cuatro Caminos), en octubre de 1919, ha sufrido un proceso acelerado a partir de 1978, afortunadamente para el ciudadano, coinciciendo con la intervención de la compañía por el Estado.Del esfuerzo inversor realizado por los poderes públicos para mejorar el servicio, una vez se hizo cargo del metro el Ministerio de Transportes, Turismo y Comunicaciones, da idea el siguiente dato: en los ocho años escasos transcurridos desde que, en junio de 1978, fuera intervenido el metropolitano madrileño, la longitud de la red de este popular me dio de transporte ha pasado de 65 a 108 kilómetros, con un aumento algo superior al 65% respecto a la existente hasta entonces.

Datos reveladores

Las líneas 6 (Cuatro Caminos-Laguna), 8 (Fuencarral-Nuevos Ministerios) y 9 (Pavones-Herrera Oria) han sido puestas ínte.gramente en explotación en estos años, además de otros tramos que completaban a la 4 (Esperanza-Argüelles), 5 (Canillejas-Ciudad Lineal) y 10 (Plaza de España-Alonso Martínez).Tan reveladores datos, con independencia de otras mejoras complementarias, y no por ello menos importantes, a las que me referiré más adelante, ponen en evidencia a quienes por diferentes motivos vienen cuestionando oportuna y sistemáticamente al metropolitano madrileño desde que fuera intervenido por el Estado, tratando de demostrar que el servicio era mejor cuando el metro estaba en manos privadas. Quizá convenga recordar a tan nostálgicos desmemoriados que los 510 millones de usuarios que se trasladaron en 1969 por los aproximadamente 50 kilómetros de red entonces en servicio, en unas condiciones de hacinamiento tal que sólo resultaban tolerables en la situación en que vivía España entoces. En 1985, con más del doble de kilómetros en servicio, como ya he señalado aniteriormente, por el metropolitano madrileño pasaron 321 milloris de viajeros. Cualquier comparación, por tanto, está fuera de lugar.

Y junto a un crecimiento tan vertiginoso, incorporando modernas instalciones al nivel de los mejores ferrocarriles subterráneos del mundo, el metropolitano madrileño está empeñado, en los últimos años, en un rápido proceso de modernización de las líneas más antiguas, que son las que cuentan con una rentalibidad social más alta.

Los usuarios de este medio de transporte han podido comprobar cómo se ha iniciado ya, en la línea 2 (Ventas-Cuatro Caminos), la sustitución de los trenes clásicos por coches de la nueva Serie 2000, mucho más cómodos y confortables, además de contar con más sistemas de control, de los que carecían aquéllos. A medidados de este año, todos los trenes que circulen por dicha línea serán modernos, y es probable que a finales de 1986 también la línea 3 (Legazpi-Moncloa) cuente con las nuevas unidades. Paralelamente a la incorporación del material móvil, se ha procedido a la instalación de sisiemas complementarios, que permiten un control permanente de todos los trenes en servicio desde el puesto de mando, además de otros equipos que aumentan la seguridad y la fiabilidad en la circulación. La automatización de la totalidad de las subestaciones que suministran energía a la red será también realidad en el próximo mes de marzo. Muchas de estas mejoras el viajero no las percibe, pero son fundamentales pará poder formular una oferta de transporte acorde con los tiempos actuales.

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Otras que sí ve el usuario, porque hacen mucho más confortable y agradable su estancia en el metro, se refieren a la reciente modernización de las estaciones de Antón Martín (línea 1) y Goya (línea 4), la remodelación de Sol actualmente en marcha y la construcción del intercambiador que la Comunidad de Madrid está realizando en la estación de Aluche. La recuperación de 150 accesos de líneas antiguas, la incorporación de megafonía a todas las estaciones y la aplicación de nuevos sistemas de limpieza son actuaciones que, también nota el viajero y que demuestran, junto al resto, la decidida voluntad del actual consejo dé intervención de la compañía y de los organismos mencionados por modernizar rápidamente este importante medio de transporte.

Vicente García Álvarez es presidente del Consejo de Intervención de la Compañía Metropolitano de Madrid.

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