El Gobierno seguirá adelante con la ley de reforma del mercado de valores, aunque adelantará, vía decreto, los aspectos más significativos
Ministerio de Economía y Hacienda sigue adelante con su idea de una ley de reforma del mercado de valores, a pesar de las medidas concretas anunciadas anteayer por el ministro, Carlos Solchaga, durante la clausura de las jornadas organizadas por APD y que verán próximamente la luz vía decreto-ley. Estas medidas tienden a adelantar la solución de las partes más acuciantes de la reforma de dicho mercado.Carlos Solchaga anunció el jueves un importante cambio en el tratamiento de las plusvalías, unido a la regulación de las sociedades y fondos de capital riesgo y la regulación de los llamados segundos mercados bursátiles. El paquete incluirá disposiciones menores, como la desaparición de la autorización oficial para la realización de emisiones de renta fija, además de la muy importante creación de un mercado de deuda pública con anotación en cuenta y sin intervención de fedatario público.
La Secretaría de Estado de Economía y Planificación del mencionado ministerio ha venido trabajando desde hace meses en la elaboración de un proyecto de ley de reforma del mercado de valores. Un borrador de anteproyecto distribuido entre los agentes de cambio y bolsa mereció tales críticas que en los ambientes bursátiles existía la idea de que la ley había quedado definitivamente aparcada.
Minusvalías y plusvalías
El cambio anunciado anteayer en el tratamiento de las plusvalías es considerado de importancia capital para el futuro de las sociedades y fondos de capital riesgo en España. Con el tratamiento con que cuentan actualmente las plusvalías, acumulándose en la tarifa general de renta, muy pocos particulares estarían dispuestos a invertir en sociedades de tan alto riesgo como las citadas.Con el paquete anunciado, el Ejecutivo pretende levantar los obstáculos actualmente existentes a nivel fiscal para ese tipo de sociedades. Así, el dividendo de tales sociedades quedará fiscalmente exento, y el 80% de su cartera podrá estar constituido por valores que no coticen en bolsa. El capital mínimo exigido, actualmente fijado en 500 millones de pesetas, se verá considerablemente reducido a menos de la mitad, según fuentes del Ministerio de Hacienda.
La creación del segundo mercado bursátil está orientada a abrir la bolsa a pequeñas y medianas empresas españolas, que hasta ahora tenían vedado ese canal de financiación. Actualmente se exigen 200 millones de pesetas de capital. social y haber registrado cuentas de resultados positivos durante los dos últimos años. La idea del Gobierno es facilitar a las pyme los beneficios que otorga la cotización oficial, rebajando el capital mínimo -la cifra concreta no está clara y existe la posibilidad de que no se exija ninguna, sino la simple voluntad de ampliar capital-, rebajando las necesidades de información y abandonando ese requisito de beneficios durante los últimos años. Habra así dos mercados en las boisas: el clásico, para los inversores que quieran garantías, y esta segunda barra, para empresas de menor dimensión.
Por otra parte, la negociación de la deuda pública fuera de las bolsas de valores mediante el sistema de anotación en cuenta puede convertir a la deuda en un instrumento de gran importancia para la regulación de la política monetaria del Gobierno. Actualmente, la deuda pública -bonos y obligaciones del Estado, deuda desgravable- son títulos valores que se negocian en bolsa. A partir del próximo decreto, las emisiones de títulos del Estado se harán accesibles a los particulares sin la intervención del agente de cambio y bolsa, que cobra un corretaje del 0,25% y que hace que la rentabilidad de los títulos a corto se la lleve el agente.
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