Condenados dos farmacéuticos por la muerte de dos parturientas en Toledo

La Audiencia Provincial de Toledo ha condenado a los farmaceúticos Ángel Navarro Ruiz y María Ángeles Muñoz Martínez, responsables del control de los laboratorios J. Navarro, de Madrid, a penas de un año de prisión menor, con las accesorias de la suspensión de cargo público y privación de derecho de sufragio durante el tiempo de condena, por un delito de imprudencia temeraria.

Asimismo, los procesados habrán de pagar un total de 12 millones de pesetas a las nueve familias afectadas en el caso conocido como el de las parturientas de Toledo.

Los hechos se iniciaron el 4 de diciembre de 1979 en el hospital de la Seguridad Social Virgen de la Salud, en Toledo. Ese día ingresaron para dar a luz nueve mujeres, de las cuales dos, Josefina Martínez, de 19 años, y Ana María Mejías, de 23, resultaron muertas a consecuencia de un cuadro hemorrágico a las pocas horas de ser hospitalizadas. Las otras siete mujeres gestantes registraron lesiones de distinta índole.

Suero contaminado

A las parturientas se les aplicó, según la sentencia, suero glucosado contaminado por una bacteria. El texto de la sentencia matiza que "las muertes y lesiones producidas se debieron precisamente a la contaminación del suero y no a otros motivos", y que este hecho no fue detectado por los procesados.La defensa de los encausados mantuvo la tesis, durante la vista oral celebrada el pasado día 20 en Toledo, de que las muertes se podrían haber derivado de la aplicación de una sobredosis de oxitofina, fármaco que se añade al suero para la dilatación del útero de las gestantes. Por su arte, la tesis médica oficial hizo hincapié en que las dosis suministradas fueron las habituales.