Sanción de un millón a una panificadora por elaborar pan falto de peso

Juan Ponz, director general de Inspección del Consumo, organismo dependiente del Ministerio de Sanidad y Consumo, ha sancionado con una multa de un millón de pesetas a José López Martín, propietario de la panificadora Chimbo, de Madrid, por elaboración y venta de pan falto de peso, según publicó el pasado martes el Boletín Oficial del Estado.

La sanción impuesta responde a una resolución del Consejo de Ministros celebrado el 9 de mayo de 1984. Esta resolución, según publicó el BOE, adquirió firmeza por la vía administrativa el pasado día 13 de enero.El expediente por el que se sancionaba a la panificadora, situada en los números 28 y 30 de la calle de Chimbo, en el distrito de Carabanchel, se inició en 1977 por el antiguo Ministerio de Comercio, a raíz de unas inspecciones realizadas en distintas panaderías madrileñas. La panificadora fue sancionada, en un principio, con una multa de un millón y medio de pesetas que luego se rebajó a un millón, por elaboración y venta de pan falto de peso, disponer de báscula averiada y venta de pan especial carente de envoltura.

El gerente de la panificadora desmintió ayer que la empresa haya sido sancionada, puesto que "la panificadora presentó un recurso por la vía contencioso-administrativa que aún no ha sido resuelto". El mismo portavoz aseguró que "todo el expediente se debe a un equívoco, puesto que inspectores del Ministerio de Comercio, en el curso de una inspección realizada en 1977, pesaron como pan normal -cuyo peso por barra es de 250 gramos- pistolas de pan especial enriquecido con vitaminas -cuyo peso era de 180 gramos-. Este tipo de pan especial, que se vendía envuelto en papel, ya no se fabrica tras la publicación de un decreto especial que prohibía su venta".

"No existió fraude"

El gerente de la panificadora manifestó que la sanción se recurrió a la Audiencia Nacional, que "decretó en un principio que no existía tal fraude, pero admitía en una cláusula de la sentencia la posibilidad de que la Administración rebajara la multa e iniciara un nuevo expediente, como así se hizo, y la panificadora volvió a recurrir de nuevo".El director general de Inspección del Consumo, Juan Ponz, que se encontraba reunido a lo largo de la mañana de ayer, no pudo facilitar ninguna información sobre este tema. Alfonso Gómez Peláez, subdirector de Normativa y Procedimientos del Ministerio de Sanidad, explicó ayer que desconocía todo lo relativo a este tema, puesto que se trataba de una actuación anterior a su llegada a ese departamento, en el que lleva tres años. "Además", aseguró, "es un asunto que se puso en manos de los tribunales hace tiempo".