Los "populares' buscan un pacto con Coalición Galega queasegure una gobernación estable

Destacados dirigentes de Coalición Popular se mostraron ayer firmemente convencidos de que el sector progresista de Coalición Galega no logrará impedir la reelección de Gerardo Fernández Albor como presidente de la Xunta, pese a las tentativas de Pablo González Mariñas y José Rodríguez Peña por lograr revocar la abstención acordada por el comité ejecutivo de los reformistas mediante una convocatoria extraordinaria del consejo político del partido. Al mismo tiempo mostraron su esperanza de lograr un acuerdo con Coalición Galega para gobernar con estabilidad.

El sector progresista de Coalición Galega, encabezado por González Mariñas y Rodríguez Peña, manifestó ayer la posibilidad de disponer de las peticiones de un tercio de los miembros del Consejo Político, integrado por 76 representantes, para convocar para el sábado o domingo próximo a dicho organismo e intentar que revoque el acuerdo de la ejecutiva de facilitar la investidura del presidente de la Xunta a través de la abstención en el Parlamento.La probable convocatoria del consejo suscita opiniones contradictorias sobre el desenlace de las discusiones. Mientras los promotores de la reunión señalan que la expansión del partido, que aseguran haber protagonizado mediante la creación de numerosos comités, hace que la decisión de la ejecutiva no sea representativa del sentir general de los militantes, medios conservadores afirman que hombres como Díaz Fuentes (Lugo) y Manuel Atanes (Orense), portavoz del grupo Franqueira, disponen todavía de resortes para reunir una mayoría de votos.

El sector progresista no ocultaba ayer que si triunfase en el próximo congreso del partido, previsto para abril o mayo, se opondría a los "consejos" de Miquel Roca en las decisiones de la ejecutiva, después de que éste se negase públicamente la semana pasada a la formación del denominado Gobierno de progreso.

Varios destacados dirigentes de Coalición Popular en Galicia con flan en que, tras la abstención anunciada ante la investidura del presidente de la Xunta, Coalición Galega acceda a un compromiso estable con el Grupo Popular qu le permita a éste gobernar con estabilidad. José Luis Barreiro, vicepresidente de la Xunta en funciones y secretario general de los aliancistas gallegos, manifestó ayer a este diario su convicción de que las conversaciones con Coalición Galega se reanudarán dentro de poco tiempo, aunque sin urgencia, para negociar el apoyo que la Xunta necesita para contar con mayoría absoluta en el Parlamento. Arropado por lo que parecía una información de primera mano sobre los debates en la ejecutiva de Coalición Galega, y la consiguiente correlación de fuerzas entre conservadores y progresistas, Barreiro opinó que el acuerdo tomado por los reformistas de facilitar la investidura del presidente de la Xunta mediante su abstención en la votación es "una decisión muy firme".

A la vez que el sector progresista promovía la convocatoria urgente del Consejo Político, con la pretensión de revocar el abstencionismo parlamentario que posibilitaría la reelección de Fernández Albor, Barreiro se mostró tranquilo y seguro de que "es inviable una rectificación" del acuerdo tomado por la ejecutiva de Coalición Galega. E incluso pronosticó, con rotundidad, que "en ningún caso se romperá la disciplina de voto en el grupo parlamentario de Coalición Galega, ni se dejará en libertad de voto a sus diputados", mientras alguno de éstos parlamentarios señalaba en privado que "está en estudio" la posibilidad de reivindicar una votación en conciencia".

En cualquier caso, bastaría con que cuatro de los 11 diputados de CG se abstuvieran para que el candidato de la Coalición Popular obtuviese la investidura.

Reinicio de conversaciones

El secretario regional de AP en Galicia asumió la anunciada abstención de los reformistas como "una salida para que no haya vencedores ni vencidos", pero presagiaba el reinicio de conversaciones con Coalición Galega "ya que nosotros seguimos siendo 34 diputados y necesitamos dos más para la mayoría absoluta".Conscientes de que, incluso en el supuesto de que se alcancen acuerdos parlamentarios con Coalición Galega, éstos se producirán caso por caso y, todavía, "diez minutos antes de que empiecen los plenos", los dirigentes aliancistas abogan por "no dejar morir" las conversaciones ya mantenidas y se muestran dispuestos a poner en práctica unilateralmente algunos de los acuerdos alcanzados, "aunque ni siquiera estén firmados".

José Luis Barreiro admitió ayer que los presupuestos generales de la comunidad autónoma para este año, que según sus previsiones no serán enviados al Parlamento antes de dos meses, probablemente recogerán las aspiraciones de Coalición Galega de obtener para sus ayuntamientos las inversiones de las que, de uno u otro modo, quedaron marginados en la anterior legislatura. El vicepresidente en funciones de la Xunta advirtió que dichos presupuestos pueden ser " una pieza clave" en el establecimiento de un compromiso estable entre su grupo y Coalición Galega

Un destacado miembro del Grupo Parlamentario Popular anuncié por su parte que la Xunta reclamará al ministro de Administración Territorial, Félix Pons, que considere la retirada del recurso de inconstitucionalidad contra la ley de normalización lingüística de Galicia, como había prometido hacer, en el caso de que se formase el gobierno de progreso.