"Todos actuamos por miedo", asegura la antropóloga británica Mary Douglas
La antropóloga británica Mary Douglas intervino ayer en Barcelona en el curso Construyendo identidades: mitos y símbolos, que organiza La Caixa. Douglas, miembro del Departamento de Antropología Social en el University College de Londres y autora de libros como Pureza y peligro. Un análisis de los conceptos de contaminación y tabú, trabaja actualmente sobre la percepción del peligro en los tiempos modernos. "Todos actuamos por miedo", dijo en una entrevista con este diario. "Los miedos y los peligros se manipulan, y ésa es la base del funcionamiento de las sociedades"
Mary Douglas tiene el pelo completamente blanco, su mirada es amable y habla con dulzura. No gesticula y toda su expresividad se concentra en los ojos. Rememora el comienzo de su carrera con una leve sonrisa. "En los años treinta", explica, "la enseñanza de la mujer se limitaba a ir a la escuela para después casarse. En la universidad no se la tomaba en serio. Yo fui a un colegio de monjas católicas, religión que todavía profeso, y la formación era algo mejor. Estudié política social y teología y creo que estar con los católicos, rodeada por un entorno protestante, fue lo que dio origen a mi espíritu crítico: las monjas, como miembros de una minoría, nos alertaban para que no nos lo creyéramos todo. Así pues, he dedicado mi vida a los símbolos y a los mitos desde un punto de vista muy crítico".La antropóloga señala con humor que el punto más negro en su primera educación fue la historia. "Cada año estudiábamos lo misque VIII... Cuando por fin llegué a la universidad me di cuenta de que tenía capacidad para estudiar, pero que no sabía prácticamente nada. Observé que lo único aprovechable de mi formación era la teología y comencé a estudiar antropología, en Oxford, como algo más o menos relacionado. Cuando terminó la guerra mundial yo trabajaba de asistente social y pasé al Departamento de Colonias, allí encontré antropólogos y hablando con ellos comprendí que eso era lo que me gustaba: contrastar la religión, la política, la economía de los diferentes pueblos; vi que mi educación servía para eso. Volví a Oxford con una beca".
Durkheim y Evans-Pritchard
Mary Douglas, teorizadora de los fenómenos ritualistas y enunciadora de lo implícito como fundamento de la relación social, señala a Durkheim como el pensador que más ha influido en ella. También Evans-Pritchard ha tenido un gran ascendente sobre la antropóloga; fue su profesor y lo recuerda como un hombre con carisma, muy inteligente y dotado de una fuerte personalidad". Añade la antropóloga que "en la época de mi formación, en la que se desarrollaban las nuevas ciencias sociales, todos eran estructuralistas y yo fui educada en ese sentido".Al hablar de su estancia en el Congo belga (actual Zaire), país en el que realizó gran parte de sus trabajos de campo, Mary Douglas parece evocar un paraíso perdido de palmeras y vestidos de rafia. "El Congo... Yo hubiera preferido ir a Italia, a España, a Grecia, para paliar mi desconocimiento de la historia, pero hacía falta dinero. Tenía en aquel entonces un profesor que era un brillante africanista y me consiguió una beca para el Congo. Todo me sorprendió al llegar allí por primera vez en 1949, sobre todo la poliandria; al principio me sentí muy perdida".
La antropóloga residió largas temporadas entre el pueblo lele y estudió sus creencias y costumbres, entre ellas el significativo rito del pangolín. "Eran gente muy intelectual y yo iba de pueblo en pueblo y les hacía preguntas, a veces, incluso, cogía la escopeta y marchaba de caza con ellos".
El objetivo central del trabajo de Mary Douglas es contribuir a que la antropología "cobre importancia dentro las ciencias sociales". La antropóloga trabaja actualmente "en la percepción del peligro en los tiempos modernos, especialmente en el peligro que se desprende de la tecnología". Ha escrito dos libros sobre los usos sociales del peligro y está a punto de terminar otro sobre el tema. "Toda sociedad posee una estructura de miedo", explica. "Todos actuamos por miedo. Esto es una realidad. Los miedos y los peligros se manipulan y es así como se mueven las sociedades".
Babelia
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