Fernández Albor, con escasas perspectivas de superar hoy la primera votación de la investidura

El candidato de la Coalición Popular a la presidencia de la Xunta, Gerardo Fernánder Albor, se somete esta tarde ante el pleno del Parlamento gallego a la votación de investidura que, previsiblemente no superará, ya que necesita mayoría absoluta -36 votos- y, por el momento, cuenta sólo con los 34 de su grupo. La segunda votación se celebraría entonces una vez transcurridas 24 horas desde la primera. Con mayoría simple saldría reelegido presidente. A Albor le bastarían en esta segunda votación los votos de CP, siempre que los 37 restantes -PSOE, 22; Coalición Galega, 11; PSG-Esquerda Galega, 3 y Bloque Nacionalista Galego, 1- no votasen todos en contra.Socialistas, PSG-EG y BNG ya anunciaron que emitirían su voto en contra. Coalición Galega, después de haber roto el martes las negociaciones con los populares, también podría sumar sus votos negativos contra la candidatura de Fernández Albor.

Los dirigentes de Coalición Galega aseguran que hasta el viernes -lo que significa que hoy votarán en contra- no se conocerá oficialmente su posición. En privado, dicen que CP va a pasar un mal fin de semana. Pero tampoco está clara la participación de CG en un gobierno de progreso, propuesto por el socialista Fernando González Laxe y Camilo Nogueira, líder de Esquerda Galega.

El secretario general de Coalición Galega, José Rodríguez Peña, llegó a hablar, incluso, de agotar los dos meses previstos para la investidura en la ley reguladora de la Xunta.

La sesión plenaria del Parlamento autónomo está convocada para la una de esta tarde. Los portavoces de los grupos Mixto -PSG-EG, BNG-, CG y PSOE disponen de medía hora cada uno para contestar el discurso de Albor del pasado martes. El candidato puede replicarles conjunta o individualmente. 15 minutos después se celebrará la primera votación. Si es rechazado, en el supuesto de no conseguir 36 votos, el Parlamento celebrará otra sesión transcurridas 24 horas.

En ella se procederá a una nueva votación en la que el candidato necesita sólo mayoría simple. Para ello, son suficientes los 34 votos de los diputados de Coalición Popular y, al menos, tres abstenciones, votos blancos o nulos, o otras tantas ausencias en los demás grupos.

En el caso de salir derrotado, el presidente del Parlamento, Antonio Rosón, tendría que volver a llamar a consultas a todos los portavoces. Así hasta un máximo de dos meses, que se cumplen el 14 de marzo, fecha en que quedarían convocadas automáticamente nuevas elecciones en Galicia.