_
_
_
_
RELIGIÓN

Los jóvenes, cada vez mas alejados de la religión

El progresivo desenganche de la práctica religiosa que se produce entre los jóvenes españoles es uno de los fenómenos que más preocupan a los medios intelectuales y eclesiásticos, según se puso de manifiesto en la presentación, el pasado miércoles, día 4, del número 20 de la revista Cuenta y Razón, dedicado al análisis del catolicismo español de los últimos años.Intervinieron en el acto el historiador Javier Tusell, director de la revista, el sociólogo José Juan Toharia, el profesor Juan María Laboa, el escritor José María García Escudero, el obispo vicario general castrense Emilio Benavent y el académico Julián Marías. Todos constataron el hecho de que la mayor parte de los españoles se declaran católicos y sin embargo cada vez es menor el número de los que practican.

Para Javier Tusell la ausencia de práctica religiosa unida a la permanencia de las pautas culturales y declaraciones religiosas es una cuestión no resuelta. Según José Juan Toharia registramos una sociedad creyente pero no practicante, no sólo en el terreno religioso sino también en otros terrenos. "La sociedad española cree también en la democracia pero apenas la practica". "Por estos motivos en los últimos años se ha producido una caída espectacular en las tasas de práctica religiosa pero no ha aumentado, paradójicamente, el número de los que se dicen ateos".

Juan María Laboa situó los orígenes de la crisis actual del catolicismo español en la "grave crisis modernista, que apenas tuvo incidencia en España", mientras que José María García Escudero afirmó que el catolicismo español ha ganado en autenticidad aunque ha perdido en presencia colectiva.

Emilio Benavent, afirmó que el desafío de la Iglesia sigue siendo cultural y social, pero especialmente religioso. En parecidos términos se pronunció Julián Marías, quien dijo que a raíz del Concilio "se produjo un alejamiento de los intelectuales de la Iglesia y últimamente se ha producido la deserción de los jóvenes". "Ahora el desprestigio de la religión se hace de forma insidiosa, aunque con apariencia amistosa, desde dentro de la Iglesia. La solución es volver a un tratamiento riguroso y enérgico de la religión".

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_