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La URSS mantendrá su posición de principal suministrador militar de Argelia

El Gobierno argelino no tiene intención, por el momento, de renovar su material militar blindado y aéreo de acción inmediata con adquisiciones en Estados Unidos o países europeos, por lo que, salvo imprevistos, la Unión Soviética mantendrá su posición de principal suministrador, según fuentes de Argel.

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Las intenciones argelinas contrastan con el optimismo que se respira en determinados sectores de la industria armamentista occidental, entre ellos España, que ven en el proceso liberalizador argelino una eventual puerta abierta a sus intereses.En estos momentos se encuentra en Argel un importante delegación soviética, presidida por el viceministro de Defensa, Yuri Maximov. Entre los objetivos de esta visita figura el análisis de las nuevas necesidades armamentistas argelinas.

Lo que sí se está produciendo en Argel es un acercamiento -importante a efectos informativos y tímido en cuanto a compras- a la producción armamentista occidental. Esto ha motivado una serie de reuniones y contactos en Argel y otras capitales con representantes militares y de la industria bélica, en los que, siempre según las fuentes consultadas, no se ha ahondado más allá de lo que es la médula espinal del Ejército argelino: las unidades blindadas de tierra y de ataque e interceptación aérea, todas ellas de origen soviético.

A juicio de observadores cualificados, sería impensable que Argelia intentase sustituir sus 700 carros de combate del tipo T-54 o T-72, entre otros, por unidades de similar capacidad ofensiva fabricadas en Estados Unidos o en los países aliados de Europa. También sería anormal, según las informaciones recogidas en Argel, que los aparatos de fabricación soviética que forman los siete escuadrones de ataque y los cuatro de interceptación aérea de la aviación argelina sufran modificaciones, entre otras razones porque se trata de un material reciente y que manejan hombres que están adaptados al adiestramiento de los técnicos del país fabricante.

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Los observadores consultados estiman que el enemigo potencial de Argelia es Marruecos, país vecino con el que mantiene un importante contencioso a consecuencia del futuro del ex Sáhara español. Si bien Marruecos y la guerrilla saharaui (cada vez mejor equipada con material pesado de guerra) sostienen un enfrentamiento armado desde hace 10 años, no son las unidades argelinas, pese a que este país apoya al Frente Polisario, las que combaten contra las Fuerzas Armadas Reales, sino el propio Ejército independentista, que cuenta ya con una brigada de tierra.Aunque el conflicto del Sáhara no forma parte, de momento, de los 11 puntos calientes del mundo, los referidos observadores estiman que, pese a que tanto Rabat como Argel intenten impedir unilateralmente una hipotética guerra, ambos países viven en una situación delicada y de permanente tensión. Argelia y Marruecos mantienen puntos de vista enfrentados sobre un eventual Magreb unido y tienen alianzas diferentes y probablemente concebidas la una frente a la otra.

Los observadores consultados concluyen su análisis asegurando que "en ningún modo" Argelia está interesada en dotar a sus fuerzas del mismo material bélico que posee su potencial enemigo, Marruecos, con armamento en su mayoría de origen norteamericano y, en menor medida, francés y español. No obstante, Argelia sí se ha interesado por otro tipo de material bélico que, sin romper el esquema organizativo de sus unidades de ataque en tierra y aire (blindados y aviación), pueda contribuir a mejorar y enriquecer la base de su Ejército. En este contexto se encuadran pedidos, o material ya adquirido, de fabricación occidental y del que también dispone Marruecos, como helicópteros tipo Puma y aviones de transporte tipo C-130 Hércules.

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