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Las feministas practican en Barcelona dos abortos ilegales para denunciar la insuficiencia de la ley de despenalización

Milagros Pérez Oliva

Las comisiones pro aborto de las diferentes regiones españolas, reunidas en Barcelona con motivo de las Jornadas Feministas Estatales, practicaron ayer dos abortos a dos jóvenes que se encontraban embarazadas de seis y siete semanas, respectivamente. La acción, que fue aprobada entusiásticamente en un pleno extraordinario, tiene por objeto denunciar la insuficiencia de la ley de despenalización del aborto actualmente vigente y constituye el inicio de una campaña destinada a desbordar la aplicación práctica de la ley mediante la realización de abortos por parte de los propios colectivos feministas.

Las feministas explicaron que eran conscientes de las repercusiones jurícas que podía tener la práctica de los dos abortos, que vulnera tajantemente la ley de despenalización, pero indicaron que si se producían represalias jurídicas, realizarían una autoinculpación masiva que comenzaría con las 4.000 asistentes a las jornadas."La ley de despenalización solamente resuelve el caso del dos o el tres por ciento de las mujeres embarazadas que desean abortar. El problema sigue, pues, planteado prácticamente en los mismos términos que antes de promulgarse la ley, con un 97% de mujeres obligadas a trasladarse a Londres o a abortar clandestinamente, a veces en precarias condiciones sanitarias. Esta es la realidad. Y puesto que el Gobierno no es capaz de asumirla ' lo hará el movimiento feminista, con todas sus consecuencias", explicó una portavoz.

"Un paso valiente"

La decisión de realizar los dos abortos fue tomada en una reunión cerrada de los colectivos pro aborto celebrada el viernes. En el plenario de ese mismo día, los colectivos propusieron "dar un paso definitivamente valiente contra la mísera ley del señor Lluch" y acordaron iniciar una fase de preparación para poder realizar abortos en un futuro inmediato.

Para evitar interferencias y preservar al máximo la identidad e intimidad de las mujeres a quienes se practicaron los abortos, la acción no fue dada a conocer hasta unas horas después de haberse realizado. Al mediodía, los servicios de megafonía convocaron a todas las participantes "a un plenario extraordianario sobre un asunto sumamente importante".

La inmensa sala en que se celebraba el pleno se llenó a rebosar inmediatamente. Unas 30 feministas subieron al escenario y explicaron que, después de una larga reflexión, el colectivo había decidido dar ya el salto cualitativo en la lucha por el derecho al aborto libre y gratuito, por lo que habían practicado la interrupción de dos embarazos esa misma mañana. El hecho fue asumido por la totalidad de la participantes en la asamblea con fuertes aplausos y muestras de entusiasmo.

Los abortos fueron practicados por el método de aspiración por "mujeres específicamente preparadas para ello", según portavoces de los colectivos, en una sala previamente higienizada y con todo el instrumental necesario. Las jóvenes que abortaron estaban embarazadas de seis y siete semanas, respectivamente, y se habían dirigido a un centro feminista para solicitar la dirección de las clínicas de Londres donde se practican abortos.

En la sala en que se realizaron quedó expuesto el instrumental y las dos botellas que contenían los embriones extraídos, prueba de que los abortos se habían practicado. La operación fue filmada y proyectada en vídeo por la tarde, acompañada de las explicaciones sobre cómo se realiza una aspiración.

Balance de 10 años

Los debates continuaron ayer con una participación masiva y de acuerdo con los planes iniciciales. La organización se había visto completamente desbordada el viernes, pues se esperaba 1.800 participantes y finalmente: han acudido 4.000, lo que ha provocado graves problemas de organización y una gran dificultad para alejarlas ya que, además, ni, el Ayuntamiento de Barcelona ni, la Generalitat aportaron todos, los albergues y ayudas a que se habían comprometido, según, han declarado las organizadoras.

La primera parte de las jornadas ha estado dedicada a hacer balance de los 10 años de feminismo en España. "La independencia del movimiento a pesar de las presiones del poder" es el aspecto más positivo del balance, además de "un importante avance en los aspectos legislativos", que han tenido, sin embargo, poca eficacia porque "las leyes siguen interpretándose con criterios ideológicos contrarios a la liberación de la mujer". En general, las feministas consideran que en estos 10 años "no se han conseguido grandes reivindicaciones, pero sí una importe concienciación de la sociedad sobre la problemática de la mujer". También se resalta como muy positiva "la unidad que ha alcanzado el movimiento en la mayoría de sus luchas".

En el apartado de estrategia para el futuro, la cuestión más controvertida es la actitud a adoptar ante las instituciones. También se plantea si el objetivo prioritario del movimiento debe en los planteamientos, o debe primar la diversidad de propuestas y tácticas.

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