Los planes de EE UU merecen el rechazo de la Internacional Socialista
La Internacional Socialista ha manifestado su rotundo rechazo a todo programa de desarrollo armamentista en el espacio, y en especial al proyecto norteamericano de la Iniciativa de Defensa Estratégica (SDI).
La conferencia sobre desarme de la Internacional Socialista, celebrada en Viena esta semana, emitió un llamamiento a las dos superpotencias, en el que se apela a "evitar toda iniciativa que pueda suponer un peligro para el resultado de los esfuerzos de desarme".
La reunión de Viena se abrió con la esperanza de que Estados Unidos y la Unión Soviética utilizaran su presencia como invitados en este foro para mostrar gestos de acercamiento ante el encuentro entre el presidente norteamericano, Ronald Reagan, y el máximo dirigente soviético, Mijail Gorbachov, en Ginebra.
Este deseo de la Internacional Socialista, expresado por su presidente, Willy Brandt, se vio frustrado con sendos discursos del jefe de la delegación norteamericana, el director de la Oficina de Control de Armamento y Desarme, Kenneth Adelman, y el jefe del departamento internacional del Comité Central del PCUS, Boris Ponomariov.
Adelman defendió la firme intención de la Casa Blanca de proseguir con la Iniciativa de Defensa Estratégica y descalificó las críticas al programa manifestando que la opinión pública occidental es víctima de "la emoción, la retórica y la propaganda soviética". Según Adelman, la Unión Soviética lleva 20 años de ventaja en la investigación sobre la defensa estratégica, y con su campaña para evitar la SDI sólo quiere mantener su monopolio.
El representante estadounidense acusó a Moscú de violar repetidamente los acuerdos SALT y el tratado ABM.
Ponomariov, por su parte, se congratuló de la crítica que la IS hizo al programa SDI.
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