El miedo al referéndum

Los socialistas españoles han tratado, según explican, de mantener una actitud distante para no provocar reacciones que puedan influir negativamente en el polémico referéndum sobre la permanencia de España en la OTAN. Pero esta cautela, casi no queriendo aparecer como miembros de la Alianza, ha provocado el absurdo resultado de no querer apoyar una resolución que urge a los países de la Alianza a construir una relación más estable y diversificada con el bloque del Este y a establecer una política de distensión y mutua seguridad "auténtica y recíproca".Esta actitud ha quedado también de manifiesto en la negativa socialista a votar la resolución sobre la opinión pública de la OTAN, en la que se recomienda la apertura de oficinas de información de la Alianza en los países miembros.

La Asamblea de la OTAN ha expresado su respeto sobre el reféndum, afirmando que lo más inteligente es no tratar de influir en la decisión soberana de los españoles. Uno de los informes discutidos asegura, sin embargo, que el referéndum es una de las preocupaciones principales de la OTAN.

Los socialistas votaron por el contrario a favor, lo mismo que la oposición española representada en la Asamblea (que también lo hizo en las cuestiones en las que los socialistas no se pronunciaron) de resoluciones sobre seguridad europea y cooperación, política científica y tecnológica de la Alianza, asuntos económicos y transferencias de tecnología.